Ante los vientos que anuncian la posibilidad del cierre de la escuela elemental Ángel G. Rivera, el alcalde orocoveño manifestó su oposición y aseguró que su administración trabaja para impedir que ocurra.

Alcalde, ¿está de acuerdo con que cierren la escuela?

No, jamás. Estoy totalmente en contra. El cierre de esta escuela se viene hablando desde ya hace mucho tiempo, pero siempre todos, la comunidad y yo, hemos coincidido en que sería inaceptable que se cierre la escuela debido a muchos factores como su lejanía de los demás planteles escolares, sin contar que la estructura física es una de las mejores en toda la región.

¿Cuáles serían las consecuencias?

Las escuelas más cercanas a la Ángel Gabriel Rivera quedan a más de 20 minutos. Los estudiantes de educación especial tendrían que ser re-ubicado en escuelas preparadas para atender sus necesidades, y esas escuelas están localizadas a más de 50 minutos de la comunidad. Además, se afectaría drásticamente la transportación de los estudiantes, que la brinda el Municipio. Esto último conllevaría cambios sustanciales en nuestras finanzas.

¿Qué gestiones ha hecho?

Nosotros ya nos reunimos con los padres para escuchar sus preocupaciones. También le escribimos al Secretario de Educación y lo invitamos a hacer un recorrido por la escuela y para que hable con nosotros y la comunidad.

¿Existe un mejor lugar?

Todos los niños que asisten a esa escuela son de la misma comunidad Cacaos. No hay un mejor lugar para ellos porque... los niños están cerca de sus padres y el plantel está en un lugar sumamente seguro.

¿Qué alternativas propone?

Ninguna. Simple y sencillamente lo prudente es no cerra. Entiendo que por la distancia que hay entre una escuela y otra, sería imposible cerrar alguna de ellas.

¿Cómo puede el Municipio ayudar?

Nosotros siempre hemos ido más allá de lo establecen los acuerdos que tenemos con el Departamento de Educación.