A pesar de que distintas agencias ambientales, tanto estatales como federales trabajan desde hace años en la conservación de los arrecifes de coral en la Isla, estos recursos naturales continúan en peligro, en parte, debido a prácticas humanas que amenazan su existencia.

La comunidad de arrecifes de corales que ubica en la bahía de Guánica es uno de ellos, según reveló Darién López, Directora de la División de Áreas Naturales Protegidas del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA).

“Hay diferentes causas que afectan los arrecifes de coral. Unas son biológicas o naturales y otras son humanas. En Guánica, por ejemplo, están bastante deteriorados con el blanqueamiento”, manifestó López. 

Según explicó la funcionaria, la sedimentación producto del material que arrastran los ríos hasta las distintas bahías es uno de los problemas principales que está teniendo un impacto directo en el ecosistema marino. 

“Guánica tiene una cuenca prioritaria que nace en Lares y allí, al igual que en pueblo como Las Marías y Maricao, hay muchas siembras de café y otro tipo de agricultura que, si no se toman las prácticas de conservación necesarias, esos sedimentos llegan a los ríos y de ahí al mar”, destacó.

“Los cambios en temperatura en el agua también afectan, pero son efectos naturales. El problema es que se están deteriorando aun más por efectos antropogénicos”, añadió López.

Otro de los efectos naturales que tuvo un impacto directo en los corales fue el paso del huracán María. Un estudio reciente revelado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) y el propio DRNA reveló que el 11% de los arrecifes de la isla se vieron afectados por el fenómeno atmosférico.