La imagen del puente colapsado en Sector 315 de Utuado ha tocado la sensibilidad de los puertorriqueños, tanto así que se han desbordado en ayuda para esta comunidad, que a más de un mes del paso del huracán María todavía está incomunicada. 

Pero, la caída del puente no solo representó dejar una comunidad aislada, sino que también amenaza con crear una emergencia ambiental, pues en el barrio ubica la planta de tratamiento de aguas sanitarias de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA).

“Al caerse el puente, se fueron las tuberías que transportaban la excreta del pueblo a la planta de tratamiento de aguas sanitarias de la AAA. La tubería quedó expuesta y con el tiempo que ha pasado ya empezaron a salir los desechos que pueden caer al río. Es un problema que podría causar problemas mayores en otras partes de la isla”, admitió el alcalde de Utuado, Ernesto Irizarry Salvá. 

Las aguas del Río Grande de Arecibo desembocan en el Lago Dos Bocas, cuerpo de agua del que se nutre el Superacueduto, que le suple a municipios como Arecibo, Hatillo, Barceloneta, Manatí y Dorado.

Ante la amenaza de contaminación en los cuerpos de agua, la AAA ordenó la construcción de un puente que permita acceso a la planta de tratamiento de aguas sanitarias y la relocalización de su tubería. 

Nogama Construction Corporation es la compañía encargada de la construcción del puente y la relocalización de la tubería desprendida. La vía en construcción, aparte de servir para que los empleados de la AAA lleguen a su lugar de trabajo, también pondrá fin a los más de 50 días de incomunicación de esta comunidad.

El supervisor del proyecto, Samuel Jiménez Jordán, indicó con alegría que la construcción del puente debe culminar en menos de un mes. 

“Al ritmo que vamos, como en tres semanas ya debe haber vehículos pasando. Tenemos urgencia porque la planta de aguas negras tiene que operar lo antes posible y los residentes de este barrio merecen tener una vía que les permita salir al pueblo a hacer sus gestiones”, dijo Jiménez Jordán. En cuanto a la tubería de aguas sanitarias, el supervisor del proyecto indicó que, como método de evitar otro desprendimiento, se pasará por debajo del río con una cubierta en hormigón y acero.

Mientras están en construcción y relocalización las nuevas vías a la planta de tratamiento de la AAA, el acareamiento de los desperdicios del municipio está a cargo de la compañía Rod Rodder. 

“El agua se está saliendo de la tubería y puede caer al río. Para mitigar ese problema se tuvo que conseguir camiones que a diario recojan esos desechos, porque ese río sucesivamente conecta con el supertubo”, mencionó Irizarry Salvá. De hecho, en ruta al Sector 315 este medio fue testigo del desbordamiento de aguas sanitarias frente en zonas residenciales aledañas al río.

El Sector 315 de Utuado acaparó la atención de las redes sociales con el Campamento Los Olvidados. Los miembros de la comunidad ingeniaron un zipline para transportar suministros sin tener que lanzarse a cruzar el río, como hacían en un principio.