Carolina. Los residentes de la comunidad Parcelas Buenaventura están hasta la coronilla con el problema de desbordamiento de aguas sanitarias que plaga a su comunidad desde hace más de 20 años.

Los vecinos de las calles Hortensia, Violeta y Orquídea mostraron a Primera Hora evidencia del grave problema de desbordamiento que experimentan durante lluvias torrenciales y que mantiene la zona con un persistente hedor.

“Hay un desbordamiento de aguas negras que no estamos seguros de donde viene, pero que corre por todos los patios de nuestras casas y cuando llueve esto se pone imposible. Se vuelve una piscina de agua sucia”, explicó Zulma Angulo de Jesús, portavoz de los vecinos, mientras mostraba fotos.

“Hemos hecho querellas desde aquel tiempo, pero nadie viene a hacer nada. Aquí uno no puede vivir con la peste y a cada rato se enferma la gente. Aquí vive mucha persona mayor y muchos niños”, añadió .

Según indicaron varios residentes, el mal olor empeora en época de lluvias. Sin embargo, ante la supuesta inacción de las autoridades, los residentes han optado por acostumbrarse aunque afirman que se ha perdido la calidad de vida mientras esperan que esta próxima temporada de lluvias no desate el caos.

El problema parece tener su origen en una ruptura de la tubería sanitaria que baja desde la comunidad Lomas de Carolina, aledaña a Parcelas Buenaventura.

“Aparentemente el tubo que lleva las aguas negras se tapó en una parte y entonces se desborda. Hace tiempito una compañía privada vino de parte de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) a destaparlo pero cuando llegaron dijeron que eso era del municipio y que no podían bregar”, dijo, por su parte, Enrique Rodríguez, otro de los vecinos afectados, aunque no pudo precisar el nombre de la compañía.

Los entrevistados coincidieron en la peligrosidad de la situación que ha probado ser un foco de infecciones para la comunidad y, más recientemente, posible hábitat para mosquitos que propagan los virus del dengue y el chikungunya. Pero, además, por la posibilidad de que el desbordamiento esté llegando hasta un cuerpo de agua cercano como lo es el Río Grande de Loíza, que discurre a solo un par de millas de la comunidad.

“Mi nieto tiene siete años y hoy me lo diagnosticaron con el virus ese (chikungunya). Esta semana empezó a tener síntomas y lo tuvimos que llevar. Un señor de aquí al lado también salió con el virus y nos preocupa que sea por culpa de ese desbordamiento”, indicó, de otro lado, Josefina Rodríguez, también vecina de la comunidad.

Por su parte, el ingeniero Javier Rivera Williams, director de la Región Metropolitana de la AAA, indicó que el sistema sanitario de esa comunidad le pertenece a su agencia, pero aseguró que en el lugar sí se han hecho reparaciones recientes

Sin embargo, dijo que “envié hoy (ayer) a recolectar data. También ordené que se haga un estudio sobre las querellas para rastrear la línea en el lugar y levantar la información para hacer las reparaciones cuanto antes”.

De otro lado, la ingeniera Isami Ayala Collazo, gerente de infraestructura del municipio de Carolina, dijo que “vamos a enviar a un grupo de inspectores para que verifiquen la situación y hacerle el acercamiento a la AAA para resolver el problema…”