Juana Díaz. “Imposible vivir con tantas moscas”.

Esta parece ser la consigna de muchos juanadinos, quienes llevan más de un mes combatiendo una plaga de moscas de procedencia desconocida.

Lo cierto es que llegar a algunas de las comunidades más afectadas y estar tranquilo es casi imposible, pues son cientos los insectos que perturban la paz de todos a cualquier hora del día.

“No podemos ni comer en calma porque aparecen de la nada”, comentó Christian Yordán, vecino de la urbanización Extensión La Fe.

Este sostuvo que el problema lleva varias semanas y que desconocen qué ha causado la desagradable plaga, aunque dijo tener sospechas del origen, ya sea del vertedero cercano, fincas de ganado o hasta de la Destilería Serrallés.

Relacionadas

En el pasado esta empresa ha confrontado problemas con la disposición del mosto y sus olores objetables.

“Tenemos que estar encerrados y se afecta la calidad de vida de la gente”, añadió el portavoz de los residentes.

Yordán pidió al alcalde Ramón Hernández Torres y a cualquier otra agencia a cargo del ambiente que les ayuden y fumiguen con regularidad.

Igual de mal la está pasado Celestino Sánchez, residente de la comunidad La Plena, quien combate las moscas encendiendo un abanico.

“Le echo de todo (insecticidas) pero no se van”, comentó el hombre mientras intentaba esquivarlas.

Asimismo, señaló que le preocupa la situación de salubridad causada por esta epidemia de insectos voladores.

Mientras, en una gomera del barrio Sabana Llana Abajo los empleados luchan para trabajar en medio de la crisis.

“Tenemos que encerrarnos para comer, es algo desagradable e incomodo”, sostuvo Carlos González.

Luis M. León señaló que había llamado en varias ocasiones al Municipio donde le decían que no sabían cuándo se resolvería el problema.

Un ciudadano que para combatir la plaga ha recurrido a venenos especializados es Pedro Santiago, de la urbanización La Fe.

Él presentó a Primera Hora un envase de agua en el que echó veneno granulado y el que le ha dado excelentes resultados.

“Cuando mi esposa cocina miles de moscas forran el screen de la ventana”, comen tó el hombre, quien recordó que no es la primera vez que atraviesan el problema, pero que en esta ocasión ha sido más grave.

Los residentes de las comunidades afectadas narraron que las moscas abundan a cualquier hora del día, pero mucho más en las mañanas.

Primera Hora intentó obtener una reacción de la directora regional de Salud, Lugelina Rodríguez, cuya secretaria refirió el caso a la oficina central de comunicaciones. Allí, el oficial de prensa Rolando Román nunca respondió a nuestras llamadas.