Después de más de cinco años de que resultara convicto, la Oficina de Ética Gubernamental (OEG) desempolvó los señalamientos que tenía contra el exalcalde de Vega Baja, Edgar Santana Rivera, y puso nuevamente sobre la mesa una querella que contiene las mismas imputaciones que en el 2012 le archivó sin perjuicio.

La OEG señaló vistas administrativas contra Santana Rivera para el 1 y 2 de marzo próximo, dos meses después de que el otrora líder del Partido Nuevo Progresista recibiera el indulto del gobernador, Alejandro García Padilla, días antes de dejar su mandato.

La condena fue perdonada cuando había cumplido cinco de los 18 años de cárcel a los que fue sentenciado. 

El indulto requiere que el exalcalde cumpla 12 meses adicionales en prisión, por lo que debe salir a la libre comunidad en diciembre de este año. 

La directora ejecutiva de la OEG, Zulma Rosario Vega, aseguró que había desistido de la primera querella ética contra Santana Rivera, presentada el 24 de octubre de 2012, en espera de que terminara el proceso de apelación de sentencia. 

Esas apelaciones llegaron hasta el Tribunal Supremo, que en octubre de 2014 declaró no ha lugar la solicitud de Santana Rivera para que revisara su caso una vez que el Tribunal de Apelaciones ratificó la sentencia emitida por el Tribunal de Primera Instancia que lo condenaba a una larga estancia en prisión.

A pesar de la decisión judicial irrevocable que mantuvo al exalcalde tras las rejas, no fue hasta junio de 2016 que la OEG presentó una nueva querella contra Santana Rivera, aunque con las mismas imputaciones que había argumentado en la querella en el 2012 y que están fundamentadas en la prueba que desfiló en el proceso criminal.

Rosario Vega adjudicó la demora en iniciar el proceso administrativo contra Santana Rivera a una reducción en el número de abogados en la OEG que requirió que los casos que se consideraban en ese momento tuvieran que reasignarse a nuevos letrados. 

“Se tuvo que revisar la prueba recopilada y examinarla y, entre todos los casos, darle la prioridad que estos entendían. No había prisa para radicar la querella, porque aquí los casos no prescriben”, indicó la funcionaria en entrevista telefónica.

Un revés que pudo haber sufrido este caso fue la muerte de uno de los testigos principales de los sobornos que solicitaba el exalcalde vegabajeño. 

Sin embargo, Rosario Vega indicó que cuenta con las declaraciones juradas de esta persona por lo que, a su juicio, el proceso de la OEG no se perjudicará.