San Sebastián. Uno de los lugares naturales más solicitados por los turistas en San Sebastián es el salto del río Guatemala, que colinda con la carretera PR-446, en el barrio Robles, donde ayer un grupo de jóvenes provenientes de Nueva Jersey se encontró con el acceso cerrado y pedía direcciones para encaminarse por el desvío.

Es el caso de Víctor Uribe, quien había visitado en el pasado a Gozalandia, un negocio que hace un tiempo cerró pero que da acceso a una cascada de agua natural que queda cerca. Uribe dirigía a sus amigos por el camino que recordaba.

“Nos encontramos con esto (la carretera cerrada) y ahora no sé cómo llegar allá”, dijo al tiempo en que pedía direcciones para encontrar un desvío delineado hace más de un año, cuando colapsó el tramo de la carretera a la altura del kilómetro 2.0.

Así como Uribe, muchos otros se encuentran con el cierre de este tramo que conecta con varios barrios de San Sebastián. Este, incluso, conduce hacia el municipio de Isabela.

Esta vía tiene precisamente uno de los tramos que reclama el alcalde Javier Jiménez en una demanda contra el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), junto a otros tantos por los que solicita atención con premura.

Aunque Jiménez reconoció haber recibido la visita de varios funcionarios del gobierno estatal para evaluar el asunto de esta carretera, luego de presentado el recurso de mandamus en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan, todavía reitera que urgen trabajos para evitar que ocurran desgracias por accidentes con ciudadanos.

“Por lo menos ya hemos tenido la presencia de la gente de Carreteras por aquí”, expresó el alcalde, sacando la lista de las vías que necesitan atención.

Por su parte, el director de Obras Públicas Municipal, Carlos Rosario, señaló que así como la PR-446 colapsó, dejando incomunicados a los ciudadanos de los barrios Robles, Planas, Aibonito Guerrero y Beltrán, quienes pasaban a diario por esta vía principal, podrían quedar incomunicados en cualquier momento aquellos conductores que transitan por la PR-111.

Y es que a la altura de los kilómetros 13.1 y 10.3 colapsó la tubería pluvial y se está socavando el terreno. El alcalde reiteró que “se pueden prevenir accidentes que cobren la vida de ciudadanos. Un aguacero grande podría hacer que colapse esa carretera, como colapsó en el pasado un tramo de esa vía a consecuencia de la misma situación que estamos denunciando”.

Jiménez sostuvo que su municipio ha recibido recortes en asignaciones de fondos para carreteras, por lo que los trabajos se han tenido que ir atendiendo con personal municipal.

Sin embargo, dijo que sigue esperando que se resuelvan los problemas en las carreteras PR-451, en el barrio Cibao, la PR-445, en Saltos, donde se requiere de vallas de seguridad para que los vehículos no caigan por una pendiente de más de 60 metros de altura y la PR-119, en el barrio Calabazas.