Bangkok.- Al menos 17 insurgentes murieron cuando varias decenas de militantes armados intentaron asaltar una base militar en la conflictiva región musulmana del sur de Tailandia, indicaron hoy fuentes castrenses.

El ataque ocurrió en Bacho, en la provincia de Narathiwat, y fue repelido por unos sesenta soldados apostados en la base que no sufrieron ninguna baja, según dijo el coronel, Pramote Promin.

"Tuvimos conocimiento anticipadamente del ataque a través de unos militantes desertores. Nos dio tiempo de asegurar la base y todas nuestras fuerzas están a salvo", dijo Pramote a la televisión tailandesa.

El militar añadió que un jefe local de los insurgentes murió en el ataque, una de las acciones más ambiciosas perpetradas por los rebeldes desde que la violencia en el sur rebrotó en 2004.

Los atentados con armas ligeras, asesinatos y atentados con explosivos en Pattani, Narathiwat y Yala se repiten casi a diario a pesar del despliegue de unos 40,000 efectivos de las fuerzas de seguridad y la vigencia del estado de excepción.

Cerca de 5.300 personas han muerto y unas 9,000 han resultado heridas en las tres provincias del sur desde que el movimiento de liberación islámico retomó las armas.

Los insurgentes denuncian la discriminación que sufren por parte de la mayoría budista del país y exigen la creación de un Estado islámico que integre estas tres provincias, que configuraron el antiguo sultanato de Pattani, anexionado por Tailandia hace un siglo.