El capitán del ferry surcoreano hundido el miércoles fue detenido hoy junto a otros dos miembros de la tripulación por abandonar supuestamente el barco sin asegurar la puesta a salvo de los pasajeros.

Lee Jun-seok, de 69 años, se enfrenta a cinco cargos, incluidos negligencia y violación de las leyes marítimas, y ha sido detenido para evitar que pueda fugarse o destruir pruebas, informó la agencia Yonhap.

La Fiscalía pidió el viernes la detención de Lee y otros dos tripulantes por haber sido evacuados en los primeros momentos del rescate sin atender a la seguridad de la mayoría de los 475 pasajeros durante el naufragio del ferri en las costas surcoreanas.

Además, el capitán podría haber incurrido en un deleito al ceder el mando a la tercera oficial, una joven de 26 años, lo que violaría las normas marítimas, que requieren primeros o segundos oficiales para pilotar barcos de más de 3,000 toneladas (el "Sewol" superaba las 6,800).

Sobre el capitán también recaen otras sospechas, como la de haber ordenado a los pasajeros, la mayoría estudiantes de entre 16 y 17 años, permanecer sentados durante la primera media hora tras escucharse una colisión, según testimonios de supervivientes, lo que habría retrasado la evacuación e impedido salvar más vidas, aparte de las 179 personas rescatadas.

Las complicadas labores de rescate continuaron durante toda la noche y las autoridades cifran en 302 el número de muertos o desaparecidos, mientras hasta el momento se han localizado 29 cadáveres.