El hotel Rigopiano, que quedó sepultado por una avalancha, tenía una categoría de cuatro estrellas y estaba ubicado en una zona montañosa de Abruzos, en la región centro meridional de Italia. Estaba situado a 1,200 metros sobre el nivel del mar y fue inaugurado en los años 70.

El lugar tenía 43 habitaciones. Contaba con sauna, baño turco, jardín, cancha de tenis, piscina cubierta y al aire libre, espacio para conferencias y seminarios. Una noche en una habitación doble costaba alrededor de $150, según su oferta en Booking.com. Era el único hotel ubicado en el Parque Nacional del Gran Sasso y Montes de la Laga.

El hotel de cuatro estrellas, ubicado en Italia, quedó sepultado por una avalancha.

"Joya en las montañas. Lugar de relajación y bienestar. buena cocina y delicioso", opinó en Google la semana pasada Verónica Vigna, una reciente huésped del lugar.