El Ministerio de Trabajo indicó en un balance que actualmente casi medio millón de personas se desempeñan como trabajadores independientes del Estado en Cuba, cifra que coincide con los empleos estatales que el gobierno anunció como su expectativa de disminución cuando comenzó una reforma económica.

Un reporte de la dependencia publicado el lunes en el periódico Trabajadores, órgano de la central sindical de la Isla, informó que unas 496,400 personas tienen licencias como autoempleados, el 10% de la población económicamente activa que suma unos 5 millones de cubanos.

Según el reporte el 65% de todos esos permisos corresponden a las provincias de La Habana, Matanzas, Villa Clara, Camagüey, Holguín y Santiago de Cuba.

En general las actividades más representadas son la de elaboración y venta de alimentos, el transporte, el alquiler de viviendas y cobradores de telecomunicaciones.

El trabajo por cuenta propia, o sea no dependiente del Estado, fue estigmatizado por el modelo cubano durante décadas hasta que en 2010 un paquete de medidas reformistas del presidente Raúl Castro abrió posibilidad a la iniciativa privada autorizando una lista de empleos independientes, que actualmente tiene unas 200 categorías.

Muchos expertos, aunque se mostraron satisfechos con las intenciones flexibilizadoras de Castro, criticaron que la lista de 200 categorías es poco abarcativa de la actividad económica y se centran en labores no productivas o de escaso valor agregado. Eso provocó que posteriormente se aprobara la creación de cooperativas no agrícolas.

Castro argumentó que era necesario hacer eficiente la economía de la isla e incluso anunció que se esperaba reducir en los próximos meses unos 500,000 empleos del sobredimensionado Estado cubano.

La cifra informada este lunes es levemente menor a los 504,600 reportados en julio pasado. En 2010 cuando comenzó la flexibilización del trabajo independiente había 157,000 personas en esta condición.