Si tienes el cabello largo, tal vez sería recomendable que te lo amarres o lo escondas si vas para Colombia. 

Es que, según "elespectador.com",  se reportaron dos nuevas víctimas de robo de cabello en Bogotá. Dicho crimen está en crecimiento debido al auge de la venta de pelucas y extensiones de cabello. 

Según el citado medio, el pasado miércoles, le robaron la cabellera a a una joven de 22 años en la localidad de Kennedy, mientras que ayer, le hicieron lo mismo a otra chica de 23, en Puente Aranda. 

Aunque los casos se dieron de forma separada, según elespectador.com, los testimonios son similares y las autoridades opinan que las delincuentes son las mismas en ambos casos. 

Las víctimas relataron que fueron interceptadas por dos mujeres que se transportaban en un vehículo blanco y que, mientras una las amenazaba con un arma blanca, la otra, les cortaba las melenas. 

“Salí del trabajo a mi casa y antes de llegar, se bajaron las dos mujeres de un carro con vidrios polarizados. Una de ellas, morena y de pelo rojo, me arrinconó y me dijo que no gritara. La otra, me cortó el pelo a pesar de los gritos”, relató una de las víctimas.

En otros lugares del mundo, como India, por ejemplo, también se ha reportado este delito. 

El medio establece que en Colombia, las víctimas no siempre entablan denuncias por el delito, que cada vez tiene mayor arraigo por la alta demanda de pelucas o peinados con extensiones de cabello natural.

El cabello que se usa para este tipo de negocio, según el medio, no siempre se obtiene de forma ilegal, pues hay personas que venden el propio o lo donan.

Elespectador.com indicó que se comunicó con un local en Chapinero y una de sus empleadas dijo que se paga entre $300 y $350 por metro. 

El precio varía dependiendo del estado del cabello y de la cantidad que se corte. “Nosotros no recibimos cualquier pelo. Hay algunos que llegan maltratados, con horquillas o quemados. Tampoco recibimos corto o de capas. Debe ser parejo”, dijo la mujer, que no quiso revelar su identidad. 

El medio indicó que el coronel Hámmer Ocampo, oficial de inspección de la Policía de Bogotá, reconoció que ese tipo de robo está en aumento en la capital y que las autoridades están trabajando para identificar a los criminales, pero que, para ello, es importante que las víctimas sometan sus denuncias.