El Departamento de Defensa informó hoy que el bombardeó que efectuó este viernes en Libia contra un campamento del Estado Islámico (EI) se llevó a cabo tras descubrir que los yihadistas que se encontraban allí planteaban "una amenaza directa" contra Estados Unidos y sus aliados.

Según informó el portavoz del Pentágono, Peter Cook, en rueda de prensa, el ataque aéreo contra las instalaciones del EI se llevó a cabo "de acuerdo a las leyes internacionales" y con el conocimiento de las autoridades libias.

"Durante la noche, se realizó un ataque aéreo en Libia, dirigido contra el campo de entrenamiento del EI cerca de Sabratah, y contra Nuredine Chouchane, también conocido como Sabir, de nacionalidad tunecina y quien era un facilitador de alto nivel del EI en Libia", aseguró Cook.

"Tomamos esta acción contra Sabir en el campo de entrenamiento después de determinar que tanto él como los combatientes del EI en estas instalaciones estaban planeando ataques externos a Estados Unidos y otros intereses occidentales en la región", añadió el portavoz, que no confirmó la muerte del yihadista.

Cook recordó que Sabir fue considerado uno de los sospechosos de perpetrar el ataque en el Museo del Bardo en Túnez, en marzo del año pasado, y ha facilitado el movimiento de potenciales combatientes extranjeros afiliados al El desde Túnez a Libia y otros países.

"Como saben, esta no es la primera vez que hemos tomado acción directa en Libia y en contra de otros objetivos de alto valor del EI y puede que no sea la última", advirtió Cook.

El ataque tuvo lugar en horas de la madrugada contra un inmueble situado en el barrio de Qasr Talil, en el extrarradio de Sabratah, y causó la muerte de alrededor 40 personas, en su mayoría tunecinas y argelinas y ninguna de ellas libia, informaron las autoridades de ese país.

Cook calificó la operación como "un éxito" dentro de la campaña que lidera el Gobierno estadounidense contra el grupo yihahadista.

Túnez, de donde es el líder yihadista Nourdine Chouchane, es junto con Francia el principal exportador de voluntarios al EI, con cerca de 5,000 combatientes emigrados a Siria e Irak, según cifras oficiales.

Gran parte de los que han regresado a Túnez han viajado después a Libia, donde han contribuido a desarrollar la rama del EI en este país.