SANTIAGO.- En julio pasado, grupos defensores de los derechos animales en Grecia denunciaron que los burros de Santorini presentaban problemas de salud, por ser montados por turistas obesos o con sobrepeso.

En la isla griega suelen detenerse cruceros repletos de viajeros, que se montan sobre los burros para que estos los lleven hasta la cima de su colina donde se encuentra Fira, la capital, en recorridos que se repiten varias veces al día. Sin embargo, el exceso de peso de algunas personas les provoca lesiones en sus columnas, en tanto que las monturas mal ajustadas les dejan un sinnúmero de heridas abiertas.

Entonces, los animalistas exigieron una restricción del peso que pueden llevar los burros, solicitud que fue finalmente acogida por el gobierno griego. Esta semana, las autoridades locales anunciaron la prohibición de que turistas obesos o con sobrepeso monten burros para pasear por Santorini, según informó Greek City Times.

En este sentido, el Ministerio de Desarrollo Rural y Alimentación publicó una serie de regulaciones para resguardar el bienestar de los burros, entre ellas que no lleven una carga mayor a los 100 kg o un quinto de su peso.

Asimismo, la normativa establece que los dueños de los burros deben asegurarse de que los animales gocen de buena salud, y por ningún motivo deben trabajar si están enfermos, heridos o preñadas. "Los animales deben recibir todos los días alimentos adecuados y agua fresca", establece también la regulación.