Los dueños del Trump International Hotel de Panamá están trabajando para quitarle el nombre del presidente estadounidense Donald Trump al edificio de 70 pisos y despedir a la compañía administradora que dirige la familia Trump. La propiedad pagó al menos 32 millones para asociarse con el nombre. 

La decisión de los dueños del hotel panameño _luego de noticias de que se le estaba pagando a Trump para dar fin a un contrato similar con el hotel Trump Soho en Nueva York_ indica continuos problemas para la marca Trump fuera de bastiones como Mar-a-Lago en Florida y el Trump Hotel en Washington. 

La Organización Trump reconoció ante The Associated Press la existencia de la gestión para retirarle el nombre y la compañía administradora a la propiedad de Panamá. Señaló que piensa que se trata de una violación de contrato. 

"No solamente tenemos un contrato válido y vinculante a largo plazo para la administración, sino que cualquier insinuación de que el hotel no está rindiendo de acuerdo con expectativas es contradicha por los hechos”, dijo la organización en un comunicado. 

Ubicado en el malecón de la Ciudad de Panamá, el hotel Trump está en un rascacielos de 70 pisos en forma de vela. Pese a los lujos _ los visitantes pueden beber tragos junto a una piscina en el 65to piso que parece flotar en el océano _, ha tenido problemas por la baja ocupación. 

"Yo compré aquí porque pensé que el nombre Trump lo hacía una inversión segura”, dijo Al Monstavicius, un médico estadounidense retirado que tiene un penthouse en el proyecto. “Pero los latinos son un problema para él en Panamá”. 

Montavicious, que dice que la ocupación en su suite ha estado en apenas 30% en meses recientes, elogió las gestiones para retirar el nombre de Trump. 

“No puede empeorar más”, dijo. 

De ser exitosa, la gestión marcaría un nuevo golpe para los negocios hoteleros de la familia Trump, que carece de la escala de las cadenas grandes internacionales dedicadas a los viajeros de negocios.