Son dos escenas de un vídeo las que sorprendieron a los encargados de la iglesia Saint Jozef, en Tilbrug (al sur de Holanda).

En una aparece una pareja teniendo relaciones sexuales en un callejón atrás del templo, y en otra, los mismos actores salen en tal actividad, esta vez, dentro del recinto, en el espacio utilizado para las confesiones de los feligreses.

La estación televisiva, que había dado a conocer las imágenes a través de Internet, las sacó de su sitio y pidió disculpas.

A pesar de las denuncias hechas en contra de Meiden van Holland, la fiscalía descartó dar inicio un proceso judicial, argumentando que la productora “no cometió ningún delito punible”. 

“Consideramos que es dañino e irrespetuoso, pero hemos revisado el libro de leyes y realmente no vemos un delito. La blasfemia no es punible y no hay violación”, señalaron.

Por su parte, el director de la iglesia, Harrie de Swart, recordó ante los medios locales que tanto los actores como los productores debieron escalar una cerca para entrar al recinto y tener acceso al confesionario.

Si bien existe la posibilidad de dar paso a un procedimiento civil, De Swart comentó que desde la iglesia optarían por pasar la página. “Ya ha habido suficiente conmoción con este tema y no condujo a nada”, aseguró.