El gobierno de Bangladesh ordenó una investigación sobre las versiones de que estaba cerrada la única salida de emergencia de una fábrica de ropa donde un incendio mató a siete trabajadoras, dijo un funcionario el domingo.

El fuego del sábado en la fábrica Smart Export Garment Ltd. ocurrió apenas dos meses después de otro incendio que mató 112 trabajadores en otra fábrica cercana a la capital, lo que suscitó cuestionamientos sobre los parámetros de seguridad en la industria textil de Bangladesh, que exporta ropa a importantes cadenas minoristas en Occidente. Las puertas de aquella fábrica estaban cerradas.

El funcionario gubernamental Jahangir Kabir Nanak dijo que se ordenó una investigación sobre las causas del incendio del sábado y las acusaciones de que la salida de emergencia estaba cerrada.

Altaf Hossain, padre de una trabajadora de la confección que murió en el incendio más reciente, presentó una demanda ante la Policía contra los tres directores de la fábrica, a los que acusa de negligencia, dijo el domingo a The Associated Press el inspector de la Policía Metropolitana de Dhaka, Shamsul Hoque.

Añadió que la Policía había iniciado una investigación.

Los médicos dijeron que la mayoría de las víctimas murieron por asfixia.

"Cuando traté de escapar por la salida de emergencia encontré la puerta cerrada", dijo Raushan Ara, un trabajador de la fábrica, citado por el diario Prothom Alo de Dhaka.

El periódico dijo que al menos 50 personas resultaron heridas en una estampida provocada por el incendio. Seis fueron hospitalizadas, mientras que otras recibieron un tratamiento de primeros auxilios por su propia cuenta.

Algunos de los heridos saltaron desde las ventanas de la fábrica de dos pisos, dijeron los sobrevivientes.

El subcomisionado de la Policía Metropolitana de Dhaka, Monzurul Kabir, dijo que los cadáveres de siete mujeres fueron hallados en la planta superior de la fábrica. Agregó que en las instalaciones se producían pantalones y camisas, pero no dio más detalles.

El funcionario de bomberos Abdul Halim dijo que les tomó aproximadamente dos horas controlar el incendio.

Varios voluntarios se unieron a los bomberos para combatir las llamas mientras una gran multitud se reunía afuera de la fábrica a la espera de informes sobre la suerte de sus familiares. Había personas llorando cerca del cadáver de una trabajadora llamada Josna, de apenas 16 años de edad.

Unos 250 obreros trabajaban en la fábrica al momento del fuego, dijo el periódico.

No se supo de inmediato si la fábrica producía ropa para alguna compañía internacional. El dueño no estaba disponible para hacer declaraciones. La Asociación de Exportadores y Fabricantes de Ropa dijo que no tenía información porque no la fábrica era su miembro.

A inicios de este mes, Wal-Mart Stores Inc. alertó a sus proveedores mundiales que los dejaría inmediatamente si subcontrataban su trabajo a fábricas que no hayan sido autorizadas por la compañía.

El lineamiento de contratación más riguroso, junto con otros cambios en su política, se produjo en medio de crecientes llamados a mejorar la supervisión de seguridad después de un incendio fatal ocurrido a finales de noviembre en una fábrica propiedad de Tazreen Fashions Ltd. que suministraba ropa a Wal-Mart y otras cadenas minoristas. Wal-Mart dijo que la fábrica no estaba autorizada a fabricar su ropa.

Wal-Mart se ubica en el segundo puesto, detrás de la marca sueca H&M, en cuanto al número de pedidos de prendas en Bangladesh.

Los incendios han provocado más de 600 muertes de trabajadores textiles en Bangladesh desde 2005, según una investigación del grupo Labor Rights Forum.