Londres.- Londres recibió hoy el 2013 con un espectacular despliegue de fuegos artificiales en el río Támesis, frente a la noria y el Parlamento de Westminster, donde unas 250,000 personas desafiaron la lluvia para sumarse a los festejos.

El espectáculo, que duró once minutos, simbolizó la culminación de un año muy importante y de gran éxito para el Reino Unido, con motivo de la celebración de los Juegos Olímpicos de Londres y los sesenta años del reinado de Isabel II.

"Qué final más fantástico para un año increíble. Visto por cientos de miles (de personas) en la capital y millones en todo el mundo, Londres demostró, una vez más, que puede mostrar con estilo eventos espectaculares de nivel internacional", dijo hoy en una breve declaración el alcalde de la ciudad, Boris Johnson.

A pesar de la lluvia en gran parte del país, la gente salió a la calle en las principales ciudades, como Edimburgo, donde unas 80,000 personas presenciaron un gran despliegue de fuegos artificiales en el centro de la capital escocesa.

Los festejos fueron, no obstante, motivo de gran actividad para la policía y los servicios de emergencia, que debieron atender numerosas llamadas, más que en años anteriores.

Según las fuerzas del orden, en Londres 96 personas fueron detenidas en las primeras horas de hoy, pero en casi todos los casos respondieron a incidentes "menores".

Los servicios de emergencia recibieron un total de 1,544 llamadas, un veinte por ciento más que el año anterior.