TEGUCIGALPA— La policía hondureña busca a tres personas que atacaron y mataron a cinco jóvenes que jugaban fútbol en una pequeña cancha de una aldea cercana a esta capital, informaron el jueves las autoridades. Tres más resultaron heridos.

"Los individuos, a bordo de un vehículo, pasaron por el lugar y dispararon repetida e indiscriminadamente contra los muchachos", dijo la policía en un comunicado. "Posteriormente huyeron".

La masacre ocurrió la noche del miércoles en la aldea de Santa Rosa, ubicada a unos siete kilómetros al sur de Tegucigalpa.

Los heridos son atendidos en el Hospital Escuela Universitario de esta capital, cuyos médicos se negaron a informar sobre su estado de salud.

Los cuerpos de cuatro de los jugadores, todos en edades entre los 18 y 24 años, quedaron tirados en la cancha. Uno de ellos intentó escapar a las balas, pero resultó mortalmente herido y cayó muerto bajo un taxi estacionado en el sitio, dijo la policía.

Algunos de los fallecidos eran estudiantes universitarios y otros trabajaban en Tegucigalpa.

La policía descubrió después el vehículo usado por los criminales abandonado a unos tres kilómetros de la cancha.

Las autoridades realizan operativos en Santa Rosa y los alrededores en busca de los asesinos, pero no han detenido a ningún sospechoso aún.

En los últimos 15 meses se han registrado 41 masacres con cuatro víctimas o más en cada hecho en Honduras, de acuerdo a un informe divulgado el jueves por el Comisionado Nacional de Derechos Humanos.

En los tres primeros meses de 2014 ocurrieron cinco matanzas. Y en 2013, hubo 111 con 180 muertos y 29 heridos.

Los crímenes son cometidos generalmente por hombres con chalecos antibalas, fuertemente armados, incluso con uniformes policiales o militares, que disparan desde automóviles y motocicletas en marcha.

Casi todos los incidentes han quedado impunes.

El Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma indica que la tasa de homicidios actual es de 79 por cada 100,000 habitantes.