PUERTO PRÍNCIPE, Haití. El huracán Matthew azota hoy martes la costa suroeste de Haití, una esquina rural del empobrecido país, en su trayectoria en dirección norte hacia Cuba y la costa atlántica de Florida.

La peligrosa tormenta de categoría 4 descargó intensas lluvias antes del amanecer a medida que el centro cruzaba el extremo de la península austral, donde mucha gente vive junto a la costa en chozas de madera y metal corrugado que tienen pocas probabilidades de soportar los vientos máximos sostenidos de 230 kph (145 mph).

Se pronosticaban entre 38 y 50 centímetros de lluvia, incluso 100 centímetros en lugares aislados, junto con marejadas de hasta tres metros, dijo el meteorólogo Dennis Feltgen, del Centro Nacional de Huracanes en Miami.

"Están recibiendo todo lo que un gran huracán puede arrojarles", dijo Feltgen.

La tormenta se desplazaba por el Paso de los Vientos entre Haití y Jamaica, que también padeció lluvias intensas e inundaciones. Se dirigía al sureste de Cuba y luego a las Bahamas.

El centro de huracanes dijo que probablemente emitiría un alerta por tormenta tropical o huracán para los Cayos de la Florida o la península y que las condiciones en las playas de la costa atlántica podrían volverse peligrosas en los próximos días.

Funcionarios haitianos dedicaron el lunes a tratar de convencer a los habitantes de viviendas precarias que aprovecharan los refugios. Algunos aceptaron el ofrecimiento, pero muchos lo rechazaron por temor a que les roben sus escasas posesiones.

"Si perdemos nuestras cosas no las recuperaremos", dijo Toussaint Laine, un desempleado que vive con su familia en una choza en Tabarre, un suburbio de Puerto Príncipe.

La agencia haitiana de protección civil reportó una muerte, la de un pescador que se ahogó en las aguas agitadas por la tormenta,, con lo que la cuenta de víctimas fatales de Matthew se elevó a al menos tres. Un hombre murió en Colombia y un adolescente en San Vicente y Granadinas a medida que la tormenta se desplazaba sobre el Caribe.

En Cuba, el gobierno declaró el alerta por huracanes en seis provincias orientales, y se retiraron las luces de los postes en las calles en Santiago para evitar su caída.

Se esperaba el paso de Matthew, el huracán más fuerte desde Félix en 2007, que en un momento alcanzó la Categoría 5, unos 80 kilómetros al este de la Bahía de Guantánamo, asiento de la base naval estadounidense, que evacuó a 700 cónyuges e hijos del personal militar estacionado allí.

Estos son algunos de los reportes de daños y víctimas que se conocen hasta el momento en diversas localidades de Haití, según el portal HaitiLibre:

En la zona metropolitana de Puerto Príncipe: la lluvia ha ido en aumento, hay árboles caídos, algunas vías bloqueadas, cables eléctricos en el suelo; en Nouvelle Touraine, en Kenscoff, hay muchas casas destruidas; el río Grise está muy agitado, creciendo y con una fuerte corriente.

En Pestel: la iglesia adventista está destruida, la escuela nacional parcialmente dañada, muchas casas inundadas.

En Dame Marie: muchos daños materiales y techos de casas destruidos, también hay inundaciones.

En Port-à-Piment: más de diez casas destruidas.

En L’Asile: casas destruidas por las aguas, daños importantes en los cultivos.

En La Victoire: fuertes vientos y lluvias; el techo de la escuela nacional Fontaine fue destruido por los vientos.

En Belle-Anse: la localidad está inundada por la subida de las aguas del mar.

En Jacmel: la escuela nacional Breman, que servía de albergue temporal, resultó dañada, el techo fue destruido.

En Port-Salut: inundaciones en la playa de Pointe Sable por la subida del nivel del mar; la playa no existe por el momento.

En Dumont: daños en cultivos y ganado.

En Tiburon: varias casas destruidas; el mar entró en la localidad.

En Anse à Veau: el mar entró a la localidad, muchas casas destruidas.

En Haut Jaboin: cinco casas destruidas; un muerto, una persona enferma que no pudo ser evacuada a tiempo de su casa antes que el mar penetrara.

En Coteaux: el mar entró al bulevar Saint-Pierre; las casas del litoral resultaron dañadas o destruidas.

En Roche à Bateau: casas destruidas.

En Carpentier: se desplomó una casa con saldo de una mujer embarazada gravemente herida, había otros dos niños en la casa.

En Jérémie: muchos techos destruidos por la crecida del mar.

Hay dificultades para lograr comunicación con las localidades de Les Cayes y Jérémie.

La cifra de desplazados a nivel nacional supera los 9,000.