El presidente norteamericano Barack Obama y el presidente cubano Raúl Castro se estrecharon la mano durante las honras fúnebres del líder segregacionista sudafricano Nelson Mandela.

El saludo entre los líderes de dos enemigos de la Guerra Fría ocurrió durante una ceremonia centrada en el legado de reconciliación de Mandela. Obama estaba saludando a varios líderes mundiales y jefes de Estado que asisten al funeral en Johannesburgo. También estrechó la mano de la presidenta brasileña Dilma Rousseff, quien ha chocado con Obama por las supuestas actividades de espionaje de la NSA.

Estados Unidos y Cuba han dado recientemente pequeños pasos hacia un acercamiento, lo que ha aumentado las esperanzas de que las dos naciones puedan estar cerca de un momento histórico en sus relaciones. Pero los escépticos advierten que los dos países han mostrado señales de acercamiento en el pasado, para regresar a las recriminaciones.

Los servicios fúnebres se llevaron a cabo en el estadio FNB en Johannesburgo.