ROMA. La decisión de las autoridades italianas de cubrir antiguas estatuas desnudas para no ofender al presidente de Irán durante su visita al país ha causado burlas en Roma.

Previo a la conferencia de prensa del lunes con el primer ministro Matteo Renzi y el presidente iraní Hasan Rouhani, paneles de madera se colocaron alrededor de algunas estatuas romanas en los Museos Capitolinos de Roma.

Cuando las imágenes de las estatuas tapadas se divulgaron en los medios italianos el martes, políticos de todo el espectro denunciaron y ridiculizaron la decisión.

El museo indicó que la oficina del primer ministro quería que las estatuas en el camino de Rouhani a la conferencia de prensa fueran cubiertas. La oficina de Renzi se negó a comentar.

Renzi y Rohuani hablaron en un cuarto con la afamada estatua de bronce del emperador Marco Aurelio totalmente vestida.