BRUSELAS  — Un violador y asesino encarcelado desde hace casi 30 años ha obtenido el derecho de morir después que los médicos determinaron que su trastorno psiquiátrico era incurable, dijeron un funcionario y un abogado el martes.

Frank Van Den Bleeken había pedido el derecho de morir porque su trastorno le provocaba "sufrimientos insoportables", dijo su abogado Jos Vander Velpen.

Dada la imposibilidad de controlar sus impulsos sexuales, el hombre no tenía posibilidades de vivir en libertad.

"Ha dicho claramente que no quería abandonar la prisión para no correr el riesgo de crear nuevas víctimas", dijo el abogado, y añadió que al considerarse un peligro para la sociedad, "no podía seguir viviendo así".

El ministerio de Justicia aprobó el traslado de Van Den Bleeken a un hospital donde los médicos pondrán fin a su vida, dijo un funcionario que habló bajo la condición de anonimato por no estar autorizado a hablar públicamente del caso.

El abogado se negó a entrar en detalles sobre el trastorno psiquiátrico o a revelar cuándo se realizará el suicidio con ayuda médica por razones de intimidad de su cliente.

Bélgica permite la eutanasia desde 2002 cuando el estado físico o psiquiátrico del paciente es incurable y constante. Unas 1,400 personas al año optan por la muerte, pero pocas veces se ha aplicado a condenados. Bélgica no tiene la pena de muerte.