El grupo yihadista Estado Islámico (EI) llevó hoy su campaña de terror a la capital iraní, Teherán, con dos ataques coordinados contra el Parlamento y el mausoleo del imán Ruholá Jomeiní que causaron al menos doce muertos.

Los atentados, que tuvieron como blanco dos edificios simbólicos, son los primeros reivindicado por el EI en Irán, país que ha logrado mantener la estabilidad pese a los conflictos que ensangrentan Oriente Medio.