PARÍS. El centrista Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen fueron los que más votos obtuvieron el domingo en la primera ronda de las elecciones francesas y se enfrentarán en un desempate el 7 de mayo.

Es la primera vez en la historia que no habrá un candidato de los dos principales partidos franceses en unas elecciones.

Le Pen y Macron, ambos con cerca del 23% del apoyo de los electores hoy conforme a los primeros estimados de voto, ofrecen un agudo contraste, pues albergan opiniones diametralmente opuestas sobre el futuro de la Unión Europea y el rol de Francia en la asociación.

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Le Pen promete sacar a Francia de la UE; Macron aboga a favor de una mayor cooperación con el bloque. Por lo tanto, la segunda vuelta electoral será el equivalente a un referéndum sobre el futuro de Francia en la UE.

Tras anunciarse los resultados el primer ministro del país llamó a los votantes a rechazar a Le Pen y a votar por Macron en la segunda vuelta.

Por su parte el candidato socialista Benoit Hamon aceptó su derrota en la primera ronda, pero aseguró que "la izquierda no ha muerto" y pidió a los franceses votar por Macron.

"¡Vamos a ganar!", gritaban partidarios de Le Pen en su comando de campaña en Henin-Beaumont. Cantaron el himno nacional francés, ondearon banderas francesas que llevaban las palabras "Marine President".

En tanto, Mathilde Julien, partidaria de Macron, dijo que éste "representa a Francia, una Francia dentro de Europa".

Entre fuertes medidas de seguridad, los franceses votaron desde primera hora de la mañana del domingo en la primera ronda de las elecciones presidenciales, considerada una prueba para la expansión del populismo en todo el mundo.

Más de 50.000 policías y gendarmes vigilan los 66.000 centros de votación habilitados en todo el país para los comicios, que se producen después del ataque del jueves en los Campos Elíseos de París, en el que murieron un agente y el agresor. Estas son las primeras elecciones que se celebran bajo estado de emergencia, en vigor desde los atentados extremistas de noviembre de 2015.

Los 47 millones de franceses con derecho a voto podrán elegir entre 11 aspirantes en la elección más impredecible en décadas.

La votación "es realmente importante, principalmente porque realmente necesitamos un cambio en este país, con todas las dificultados que estamos afrontando y el terrorismo", dijo Alain Richaud, un residente en París que esperaba para votar.

Las encuestas avanzaban desde antes una ajustada competencia entre los cuatro principales aspirantes que buscan pasar a la segunda vuelta.

Según los sondeos, Le Pen y Macron eran los favoritos. Estaban también el conservador François Fillon, ex primer ministro y el aspirante de extrema izquierda Jean-Luc Melenchon.

Una tasa de paro que alcanza el 10%, la situación económica y la seguridad son las principales preocupaciones de los votantes.

La elección es considerada un medidor de la opinión pública en torno a la Unión Europea. La mayoría de los candidatos han criticado duramente a la UE.

La salida de Francia podría causar la desintegración de la UE.