El superintendente de la Policía, Héctor Pesquera, negó hoy a comentar sobre los casos de asesinato de Lorenzo González Cacho y Carmen Paredes, de los que aún no hay responsables, pero advirtió que despedirá de la uniformada a cualquiera que filtre información de estos crímenes.

Pesquera, quien participó en una ceremonia de graduación de 110 cadetes en el Teatro Tapia, rechazó expresarse en torno a investigaciones en marcha, pero aseguró que, de confirmarse que algún empleado de la Policía está filtrando información, éste será destituido de su cargo.  

"Precisamente el filtrar una información que se tenga y que no se puede filtrar porque se está bajo investigación, es lo que puede dañar un caso. Y yo les voy a decir de la parte que a mí me corresponde: si yo encuentro pruebas de que alguien de mis oficiales está dando una información indebida a cualquier persona, prensa o lo que sea, dejó de ser policía", sentenció el superintendente.

El superintendente dijo estar confiado en que la prensa no publicará información que no sea cierta y que se entienda que es de carácter confidencial.

"Todo lo que sale en estos medios, exactamente todo, es lo que los abogados de la defensa usan en el caso al final. Y si lo que queremos es perder el caso, pues podemos hablar de él todos los días", expresó el funcionario.  

Pesquera no entró en detalles sobre cuáles son las credenciales de un perito contratado para investigar el caso de Lorenzo González Cacho ni sobre el dinero que se invertirá en el profesional.