Los cuatro arrestados por la muerte del publicista José E. Gómez Saladín se declararon no culpables hoy ante la magistrada federal Silvia Carreño durante una vista de lectura de acusación y de fianza.

Los individuos, que se mantuvieron inexpresivos durante la audiencia en el Tribunal Federal de Hato Rey, permanecerán en prisión luego de que la togada no asignara una fianza, como era de esperarse al tratarse de un caso de asesinato.

Los detenidos enfrentan cargos de fraude bancario y carjacking por el caso del publicista que murió luego de ser torturado por sus secuestradores. Éstos fueron identificados por las autoridades como Rubén Delgado Ortiz, Edwin Torres Osorio, Alejandra Berríos Cotto, mejor conocida como “Pochi”, y Lenisse Aponte Aponte, alias “Prieta”.

De acuerdo con datos recopilados por la Policía tras los arrestos, los últimos minutos con vida de Gómez Saladín fueron una vil agonía en la que sus asesinos utilizaron varios medios violentos para acabar con su vida. Primero, trataron de ahorcarlo con un cable, luego le dieron un golpe con un gato (herramienta hidráulica que se utiliza para levantar un auto), intentaron quemarlo y, finalmente, le dieron varios golpes con unos palos.