La jueza federal Silvia Carreño-Coll autorizó hoy cargos contra una mujer en Bayamón que inyectaba silicona ilegalmente a pacientes,  lo que significa violaciones al Título 21 Federal, conocida como la Ley de Alimentos y Medicinas.

Según un comunicado de la fiscal federal, Rosa Emilia Rodríguez, dos testigos identificaron a Rosa Betancourt-Farfán como la persona que les perjudicó la salud con los tratamientos estéticos.

Una de las mujeres se querelló en mayo del 2013 con la división legal de la Junta de Salud, que contactó a la Administración de Drogas y Alimentos (FDA por sus siglas en inglés), para informar que la afectada recibió los procedimientos para agrandar sus glúteos por la acusada que se identificó como enfermera, apodada "Rosa la de Venezuela". 

Pagó por el procedimiento $1,200 en efectivo. Testificó a la FDA que luego del tratamiento sufrió percances de salud, como dificultad para respirar y dolores de espalda. Su condición empeoró en el 2015.

La segunda perjudicada, que se vio afecta seriamente y recibió tratamiento en Estados Unidos,  dijo que Betancourt-Farfán la inyectó con células madres para aumento de glúteos. Añadió que vio una fila de 10 personas que esperaban en la residencia de Bayamón donde se dio el tratamiento. 

La silicona es una sustancia líquida regulada por la FDCA de la cual se requiere licencia para ser administrada. La misma se usa para regenerar tejidos y no para aumentos en cualquier parte del cuerpo.

Si usted se vio afectada por la acusa o conoce a alguien que pasó por el mal rato, puede comunicarse  con la Junta de Licenciamiento y Disciplina Médica y Oficina de Reglamentación y Certificación de los Profesionales de la Salud al 787-765-2929, ext. 6589.