Luis F. Alicea Colón, quien es sospechoso del asesinato del boxeador Kenneth C. Díaz y de participar en la masacre del residencial Jardines de Cupey, fue acusado hoy en el Tribunal de San Juan por el asesinato de Jean Luis Román Nieves, ocurrido el 18 de enero en el área de la cancha del residencial Monte Park.

La juez Lady Buono De Jesús encontró causa para arresto contra Alicea Colón, conocido en la calle como Luis Trenza, por asesinato y cuatro violaciones a la Ley de Armas. Le fijó una fianza de $1.1 millón y lo devolvió a prisión. Contra su cómplice en el atentado, Luis F. Villegas Nieves, se presentaron violaciones a la Ley de Armas y asesinato con fianza de $1.4 millón.

 Román Nieves, de 27 años, murió en el atentado, mientras que Gueiby Vaquel Santiago, de 42, resultó herido de bala. Según fuentes, Román Nieves controlaba el punto de drogas de Monte Park.

 Alicea Colón fue arrestado durante la madrugada del 20 de febrero por agentes de la división de Drogas de Carolina en medio de un allanamiento diligenciado en una residencia del sector Roberto Sesto, en Trujillo Alto.

Durante la intervención, se arrestaron a tres mujeres, a un hombre y a Alicea Colón. A estos se les ocupó un rifle AK-47, un cargador con 66 municiones para rifle, 15 municiones adicionales, un chaleco a prueba de balas, una máquina de contar dinero, y tres bolsas plásticas con picadura de marihuana.

Según fuentes, Alicea Colón es sospechoso del asesinato del boxeador Díaz Rosa, de 21 años. Este fue ultimado a mediados de enero frente a la escuela Alejandro Tapia, de las parcelas Carraízo, en Trujillo Alto, mientras compartía con unas amistades.

Díaz Rosa laboraba como guardia de seguridad para la compañía Génesis, pero al momento de su muerte no estaba en labores. No se le vinculaba a actividad criminal alguna.

En la balacera, resultaron heridos Carlos J. Rodríguez Ortega, de 21 años y residente de la urbanización Rivieras de Cupey, y Frankie Matos Ruiz, de 25 años y quien dijo era primo de Díaz Rosa y residente del barrio Carraízo.

La división de Homicidios no ha podido establecer un móvil claro detrás del crimen. Uno de los ángulos apunta a que uno de los sujetos en la escena tenía algún tipo de deuda por la venta de piezas de auto.

Mientras, en la masacre del residencial Jardines de Cupey, ocurrida el 28 de agosto del pasado año, perdieron la vida José D. Ayala García, Luis Velázquez Andino y el presunto blanco del ataque, Luis Ojeda Andino, de 23 años. Supuestamente, el crimen se debió al asesinato de un familiar de un conocido narco de Cupey.

El pasado 10 de septiembre tres sujetos fueron detenidos en relación a la matanza: los hermanos José Resto Ramos y José Daniel Resto Figueroa. Contra los hermanos pesaban órdenes de arresto por posesión de un vehículo hurtado y piezas de auto robadas luego de que el mismo día de la masacre se ocuparan dos guaguas llenas de impactos de bala en el sector Los Ramos, de Trujillo Alto. En el interior de las guaguas se encontraron casquillos compatibles con el calibre utilizado en Jardines de Cupey.

Un tercer hombre, que nunca fue identificado por la Policía, fue detenido a principios de septiembre en posesión de un revólver.

Evidencia ocupada en el lugar dio paso al arresto de los sujetos. Este medio supo que a los detenidos se les tomó pruebas bucales para comparar su material genético con el levantado en la escena y todavía esos exámenes no están listos.

En la escena se recuperaron alrededor de 130 casquillos de rifles AR-15 y AK-47, de calibre .40 y 9 milímetros