La jueza Myriam Jusino Marrero, del Tribunal de Bayamón, encontró causa ayer para juicio contra 10 oficiales de la Unidad de Operaciones Especiales del Negociado de Instituciones Juveniles del Departamento de Corrección y Rehabilitación, acusados de agredir a 14 confinados durante un registro rutinario en la cárcel de Bayamón el 21 de marzo de 2013.

Los oficiales Lorenzo Ortiz Torres, Carlos Javier Otero Ortiz, Israel de Jesús Pérez, Ramón Cora Romero, Sigfredo José Acosta Acosta, Juan Josué Montero Negrón, Gabriel González Montalvo, Guarionex Galarza González, Nelson Rodríguez Aponte y el teniente Daniel Rodríguez Rodríguez enfrentaban ocho cargos de violación a la Ley de Armas por golpear a los confinados con el roten.

Sin embargo, Jusino Marrero encontró causa solo en cinco cargos, confirmó a este medio el fiscal Miguel Alameda Ramírez.

 La jueza pautó la lectura de acusación para el 31 de enero de 2014 y el inicio del juicio para el 27 de febrero.

El 31 de enero también se celebrará la vista preliminar en alzada solicitada por Alameda Ramírez y la fiscal Arlene Gardón Rivera.

La vista preliminar estaba pautada para continuar el 31 de enero, pero el fiscal Alameda Ramírez indicó a este medio que el Ministerio Público tomó la decisión de someter el caso luego de sentar a declarar a ocho confinados porque entendía que había presentado suficiente prueba para esa etapa del proceso.

Además, los oficiales penales encaran 13 cargos por agresiones menos graves relacionadas a otros golpes realizados sin el uso del roten.

Por tratarse de delitos menos graves, estos cargos pasaron de la vista para encontrar causa para arresto directamente a la etapa de juicio. Ahora todos los cargos deberían consolidarse en una sala.

Durante la vista de ayer, los confinados ofrecieron detalles de los golpes que recibieron durante un incidente ocurrido la mañana del 21 de marzo en la cárcel 292 de máxima seguridad durante un registro rutinario.

Relataron que los oficiales llegaron soltando "palabras soeces y en actitud negativa" y que durante la escaramuza recibieron golpes con rotenes y fueron rociados con gas pimienta.

El Ministerio Público también presentó a la magistrada imágenes de los vídeos de seguridad de la institución penal. La divulgación pública de estas imágenes causó revuelo e indignación entre la ciudadanía.

Por su parte, algunos abogados defensores trataron de establecer que el incidente ocurrió porque los confinados no siguieron las órdenes de los oficiales durante el registro donde se ocuparon drogas. Otros insistieron en la falta de identificación adecuada de los imputados.