Una mujer que inyectaba ilegalmente silicona líquida para tratamientos estéticos fue sentenciada a nivel federal a un  año y tres meses de cárcel, informó hoy la fiscalía.

Además del periodo en cárcel, el juez federal Daniel R. Domínguez también sentenció a un año de libertad supervisada a Rosa Betancourt-Farfán, quien se hacía llamar "Rosa la de Venezuela" y se declaró culpable en este caso en mayo pasado.

Según la fiscalía, una de las mujeres inyectadas por la condenada sufrió complicaciones de salud luego del tratamiento.

“Su vida  está en peligro si recibe uno de estos tratamientos adulterados. urgimos a la ciudadanía no confiar en aquellos que claman ser profesionales médicos y ofrecen tratamiento fuera de oficinas médicas certificadas", dijo en declaraciones escritas la jefa de la fiscalía federal, Rosa Emilia Rodríguez.

La Oficina de Investigaciones Criminales de la Administración federal de Drogas y Alimentos (FDA) investigó el caso. 

“La silicona líquida inyectada en cuerpos puede causar serio daños y hasta la muerte", dijo Justin D. Green, director de la oficina de Miami de esta oficina. Agregó que" la FDA no aprueba estos productos" para moldear cuerpos.

La jueza federal Silvia Carreño-Coll autorizó en diciembre de 2016 cargos contra esta mujer en Bayamón que inyectaba silicona ilegalmente a pacientes,  lo que significa violaciones al Título 21 Federal, conocida como la Ley de Alimentos y Medicinas, luego de que se identificaran a al menos dos víctimas de la mujer.

Una de las mujeres se querelló en mayo del 2013 con la división legal de la Junta de Salud, que contactó a la Administración de Drogas y Alimentos (FDA por sus siglas en inglés), para informar que la afectada recibió los procedimientos para agrandar sus glúteos por la acusada que se identificó como enfermera, apodada "Rosa la de Venezuela". 

Pagó por el procedimiento $1,200 en efectivo. Testificó a la FDA que luego del tratamiento sufrió percances de salud, como dificultad para respirar y dolores de espalda. Su condición empeoró en el 2015.

La segunda perjudicada dijo que Betancourt-Farfán la inyectó con células madres para aumento de glúteos. Añadió que vio una fila de 10 personas que esperaban en la residencia de Bayamón donde se dio el tratamiento. Luego se vio afectada seriamente y recibió tratamiento en Estados Unidos,. 

La silicona es una sustancia líquida regulada por la FDA de la cual se requiere licencia para ser administrada. La misma se usa para regenerar tejidos y no para aumentos en cualquier parte del cuerpo.