El juez Harry Massanet Pastrana, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, condenó este martes a José Miranda López a cinco años de prisión por encubrir a su pareja, Xiomara Rodríguez Flores, convicta por el asesinato de su bebé de cinco meses al que luego colocó en un congelador en hechos ocurridos en diciembre de 2012.

"Me arrepiento de todo lo que pasó... Me disculpo de todo", dijo el acusado antes de que el juez le dictara la sentencia.

"Que de esta experiencia negativa saque algo positivo. Esta es una de las historias más tristes que ha visto este pueblo", indicó el juez, por su parte, el juez.

El hombre encaraba dos cargos de maltrato de menores y un cargo de destrucción de evidencia (encubrimiento). Massanet Pastrana le dictó una pena de cinco años por cada uno de los dos cargos de maltrato de menores y tres años por el delito de encubrimiento. Todas las penas son para cumplir de forma concurrente.

Miranda López, de 43 años de edad, quien no es el padre del infante, hizo alegación de culpabilidad por los delitos imputados sin someterse a juicio. Actualmente, está preso en el centro de detención federal de Guaynabo, donde tiene pendiente un caso relacionado con sustancias controladas, indicó su abogado, José Roselló, quien lo representó de oficio.

"Creo que con José se ha sido un poquito injusto porque él asumió responsabilidad con esos niños (los hijos de Rodríguez Flores) que no eran suyos. Él trató de darle resucitación (al niño que fue colocado en el congelador), pero ya el bebé estaba muerto", sostuvo el abogado.

Rodríguez Flores se declaró culpable de provocar la muerte del infante y ya el juez Massanet Pastrana le impuso 99 años de cárcel por el delito de asesinato.

Tanto la mujer como Miranda López encaraban dos violaciones al artículo 58 de la Ley contra el Maltrato de Menores porque, además del bebé fallecido, la mujer tenía otro niño de cinco años que le fue removido al ocurrir los hechos en una residencia que la pareja compartía en Puerto Nuevo.

La mujer confesó que le dio un biberón de leche y majado de yautía y batata al infante de cinco meses, y que luego lo observó ahogarse en su propio vómito. También dijo que como el pequeño realizaba unos sonidos mientras se ahogaba, lo apretó contra una almohada durante cinco o diez minutos para, alegadamente, callarlo.

 Al día siguiente, Miranda López encontró al bebé muerto y decidió guardarlo en la nevera porque en su contra pesaba una orden de arresto por un caso federal.

 La Policía descubrió la macabra escena del bebé congelado cuando el 18 de diciembre de 2012 llegó a la casa de la pareja luego que la mujer llamó al Sistema de Emergencias 9-1-1 para reportar un supuesto incidente de violencia doméstica.