La División de Violencia Doméstica del área de San Juan no ha logrado dar con el paradero de una fémina de 19 años, señalada como sospechosa de ocasionar quemaduras a su novio y a la expareja del joven, al lanzarles agua hirviendo mientras ambos dormían juntos.

El suceso ocurrió este, viernes, de madrugada, en una residencia localizada en la calle Lippitt, en Barrio Obrero, pero las autoridades tuvieron conocimiento del evento hoy, sábado.

La Policía se movilizó cuando personal del dispensario José S. Belaval, en Santurce, les notificó sobre los hechos, luego que una de las personas quemadas acudió a recibir asistencia médica y posteriormente contó lo sucedido.

Según informes preliminares bajo investigación, el viernes, un chef de 25 años discutió con su novia y decidió irse a su apartamento a celebrar su cumpleaños con una expareja, de 19 años. De madrugada, su actual pareja, también de 19 años, entró al apartamento porque tenía llave y los encontró durmiendo juntos. Entonces, hirvió agua y se las lanzó sobre sus cuerpos.

“Ella llega en horas de la madrugada ya que tenía llave de la puerta y le dio tiempo para calentar agua y le ocasionó daños ya que le arrojó el agua”, dijo la agente Jenny Nieves, supervisora interina de la División de Violencia Doméstica del área de San Juan.

La fémina de 19 años quedó recluida en el Centro Médico debido a las quemaduras de segundo grado que sufrió en el lado izquierdo del torso y el pecho. Mientras el joven chef, quien trabaja como cocinero en un restaurante en San Lorenzo, fue dado de alta ya que las lesiones en el lado derecho de su cuerpo fueron superficiales, detalló Nieves.

La agente Nieves reveló también que el caso fue consultado con la fiscal de turno Sarimar Andreu, quien se comunicaría con un fiscal de la unidad especializada para que determine el curso a seguir en la pesquisa.

En esta etapa de la investigación, aunque se logró entrevistar preliminarmente al perjudicado, el hombre no se encontraba capacitado para prestar una declaración jurada en la Fiscalía de San Juan ya que estaba bajo efectos de sedantes. De igual manera ocurre con la fémina, quien permanece recluida en el hospital.

Tampoco la presunta agresora, quien reside en Carolina y renunció a su trabajo en una cafetería hace solo una semana, ha sido localizada por los investigadores para que ofrezca su versión de lo sucedido.

Según Nieves, en este caso, no se activó el protocolo de casos de violencia de género de inmediato porque luego de ocurridos los hechos la pareja llegó hasta el Centro Médico en Río Piedras donde informó que se habían quemado accidentalmente, al virarse una olla con agua hirviendo sobre sus cuerpos.

En ese momento ambos fueron atendidos por el personal médico y la fémina quedó recluida debido a que presentaba quemaduras de cuidado, pero el joven fue dado de alta.

Sin embargo, como no se sentía bien temprano el sábado, acudió al dispensario José S. Belaval, en Santurce, y al ser atendido por un médico, contó su versión de los hechos. Por esa razón, la institución cursó la querella de violencia de género al Precinto de Barrio Obrero durante la mañana del sábado.