Cidra. “Mami, llegué...”.

Tocó la ventana de la habitación donde su madre dormía, caminó al balcón de la residencia y, de momento, se escucharon gritos seguidos por una ráfaga de disparos.

Jessica Denisse Colón Vera, una madre de 25 años, murió ayer en el balcón de la casa en la que residía con sus progenitores en Cidra, luego de ser atacada a tiros en momentos que llegaba de su trabajo en una gasolinera de Cayey.

“Cuando va a abrir la puerta, ahí fue que se sacó el grito y se escucharon los tiros”, relató Pedro Rosado Colón, padrastro de Colón Vera, madre de dos varones, uno de 10 años y otro de año y medio.

“Yo abro le ventana, miro, no veo a nadie, ahí la mamá sale y se encuentra con ella tirada en el piso. Fue una cosa terrible. Jamás pensé, en los 67 años que tengo, vivir un momento así, jamás. Es uno dolor que uno no quisiera tener nunca”, señaló el hombre.

Fue el mayor de los dos niños el que más sufrió el impacto al ver a su madre en el suelo.

“El de 10 años, el abuelo llegó y se lo llevó. El chiquito tiene un año y medio y se la pasa jugando por ahí. Hace un rato preguntó por mamá y eso choca, choca”, dijo.

Hacía un mes que Jessica se había mudado a residir con su mamá, luego de haber sufrido un robo en su casa.

Sus familiares le desconocían alguna relación o que tuviera alguna riña.

“Ella era muy privada en sus cosas... tenía 25 años pero parecía de 40. Era una muchacha muy madura. Todavía nos preguntamos cómo, por qué. De mi parte, no tenía idea de que estuviera pasando algo”, abundó.

Y esa, precisamente, es una de las interrogantes que la Policía intenta responder para esclarecer este asesinato que estremeció el barrio Rincón.

También se investiga si quien o quienes la atacaron accedieron a la residencia a pie o tenían a alguien que los esperaba en la carretera principal.

La vivienda está ubicada en el tope de la montaña y no hay vecinos inmediatos, por lo que quien llegó hasta allí lo hizo con intención.

Sobre la posibilidad de que se trate de un caso de violencia de género, el director del Cuerpo de Investigaciones Criminales del área de Caguas, el capitán Gerardo Oliver, indicó que los padres de los dos hijos de la víctima se encuentran encarcelados, uno en el Centro Metropolitano de Detención, en Guaynabo, y el otro en la Cárcel Las Cucharas, en Ponce.

Al preguntarle al oficial si el crimen podría relacionarse con un acto de venganza contra uno de los padres de sus hijos, dijo que al momento se desconoce.