Arecibo- La selección del jurado en el caso por asesinato contra el maestro de educación especial, Christian G. Serrano Chang, acusado de matar a golpes en agosto pasado al niño Dylan Díaz Santiago en un residencial en Manatí, se centró este martes en escuchar la visión de lo que entienden por justicia el grupo de potenciales jurados, conocer sus prejuicios, así como cuál es su acceso a los medios de comunicación.

Además, la jueza Iris Reyes Maldonado, de la sala 301 del Centro Judicial de Arecibo, recordó a los 41 potenciales jurados que impuso una orden de mordaza en este caso, que incluye la prohibición de discutir sobre el proceso con otra u otras personas, no importa sea por mensajes de texto, internet, redes sociales o en persona.

"Aquí nadie se puede comunicar de los hechos de este caso por redes sociales", enfatizó la jueza durante el segundo día de desinsaculación o selección del jurado.

La jueza Reyes Maldonado cuestionó a cuatro candidatos a jurado si su parentesco con empleados de la Rama Judicial o de la Policía les impediría ser objetivos en el caso, y todos aseguraron que esto no sería un impedimento.

Una empleada retirada de una fábrica de ventanas dijo que no tiene perfil en la red social Facebook y que es bien celosa con sus fotos personales. Dijo que tiene dos nietos, muchos sobrinos y aseguró que para ella un tribunal es "deprimente".

 Otra candidata a jurado que es sicóloga planteó que por trabajar con niños "siento que no podría ser objetiva" en este caso y añadió que no cree que un acusado debe estar bajo fianza si se le imputa un cargo grave. Serrano Chang está libre bajo fianza en la actualidad.

Otra candidata a jurado dijo que se inhibiría al momento de deliberar. "Yo no soy quién para juzgar", dijo la mujer.

Por motivo de la orden de mordaza, fuera de sala el abogado de defensa, Javier Santiago Santos, se limitó a hablar en términos generales sobre el proceso y dijo que la selección de jurado debía durar hasta la próxima semana y que el juicio que podría extenderse hasta el 11 de abril. La fiscalía ha anunciado 14 testigos, una de ellas la madre del menor, Rayma Salgado, quien también encara cargos por maltrato por la muerte del niño, pero en un juicio separado.

Los hechos ocurrieron en agosto de 2013, cuando el niño de dos años fue llevado por Serrano Chang, de 26 años, y por la madre del menor, de 29, a un hospital de Manatí. La mujer, residente del residencial Brisas de Campo Alegre en Manatí, alegó que el infante había sufrido una caída días antes y que esa noche Salgado lo observó pálido y que trataron de reanimarlo en su casa. Estudios posteriores del Instituto de Ciencias Forenses (ICF) indicaron que el menor murió por traumas sufridos en diferentes instancias, que según las autoridades eran cónsonos con una golpiza.

Serrano Chang, quien lucía tranquilo este martes, no ofreció declaraciones al salir del tribunal. Su padre de crianza, el retirado teniente coronel de la Policía, José F. Cruz Feliciano, se limitó a decir que su hijo es inocente de lo que se le imputa.

Durante la selección de jurado hoy, las preguntas fueron realizadas por la jueza Reyes Maldonado y por el equipo de abogados de la defensa, que además de Santiago Santos incluye a los abogados Harry Olivero Llorens y Goodwin Aldarondo Jiménez. El ministerio público fue representado por el fiscal de distrito de Arecibo, Wilson González Antongiorgi y José Alberto Acevedo.

El proceso de selección de jurado continuará mañana, miércoles, a partir de la 1:30 de la tarde en el Tribunal de Arecibo.