Mayaguez. - La maestra de escuela elemental Dora Alves Troche regresó hoy al Tribunal de Mayagüez, donde se ve una vista preliminar en alzada en su contra por maltrato a menores, en la sala de la jueza Carmen Martínez Alvarado.

Esta vez el fiscal Carlos Cáceres llamó al estrado a cinco testigos, entre estos, cuatro madres y una de sus estudiantes para agosto de 2013, cuando enseñaba el cuarto grado en la escuela Luis Muñiz Souffront en Joyuda en Cabo Rojo.

Según desfila la prueba, el hijo de Yolanda Cortes  sufrió consecuencias tan pronto como al tercer día de que hubieran comenzado las clases, cuando pidió a la maestra que lo dejara ir al baño, pero terminó haciéndose sus necesidades encima, porque no llegó a tiempo al baño.

"La maestra le dijo que no podía ir hasta que terminara de copiar lo que había en las dos pizarras", declaró la madre del menor a preguntas del fiscal Caceres.

Cortes señaló que luego del incidente Alves Troche alegadamente le puso a su hijo el sobrenombre de "payaso". Incluso -dijo- se lo escribió en la libreta.

Este segundo incidente no fue ignorado por la madre, que solicitó una reunión con el director escolar, Richard Cruz Irizarry. Supuestamente cuando se reunieron con el principal, este le enseñó la evidencia que había en la libreta a la maestra “y ella se rió”. 

En el contrainterrogatorio el abogado de defensa, licenciado José Velázquez Grau, preguntó si Alves Troche había confirmado que lo escrito en la libreta (payaso) era su letra, a lo que Cortes  no pudo precisar.

También trató el abogado de establecer que el niño padece de gastritis y que el accidente camino al baño se debió a que le cayó mal el almuerzo.

En el caso del hijo de Lisuan Acosta Jusino, supuestamente "la maestra le decía bruto porque sacaba F", según lo que declaró la testigo ante la jueza Martínez Almodovar. 

A preguntas del fiscal Cáceres esta dijo que el día que se enteró de todo lo que estaba pasando en la escuela cuando fue citada por la división legal del Departamento de Educación (DE) el 11 de octubre.

Ese día los niños tuvieron que escribir en un papel una declaración con todo lo que pasaba en el salón hogar. 

Mientras -dijo- la maestra permanecía en el salón con otros estudiantes cuando supuestamente "se caldearon los ánimos".

"Sentí una gritería y prácticamente se formó un motín", declaró la madre que entonces se encontraba en el segundo piso de la escuela con los demás querellantes entrevistándose con la representante de la División Legal del DE, Socorro Quiñones.

Por su parte, Brendaliz Carlo declaró que su hija le contó que en una ocasión tuvo que defender a su compañera de clase, cuando la maestra supuestamente la paró al frente de todos los estudiantes y le "dijo que era negra y que los negros apestaban".

A preguntas del fiscal Carlo señaló que su hija "le dijo a la maestra que no es bueno burlarse de otros niños porque no todos somos iguales".

Agregó que en una ocasión Alves Troche le preguntó a su hija “que si escuchaba por el culo" porque no se sentaba cuando la mandaba. 

Supuestamente un día la madre preocupada, fue al salón a hablar con la maestra sobre el comportamiento de su hija y que cuando entró al salón, Alves Troche tenía los pies sobre el escritorio, postura que mantuvo incluso cuando le dijo que "no tenía nada que decirme, que le preguntara a la nena".

Durante la tarde, la hija de Carlo declaró ante la magistrada en sala, delante de la maestra imputada. Sin embargo, por orden del Tribunal se desalojó al público y la prensa por tratarse de una menor de edad.

Seguido subió al estrado Daisy Pratts, quien declaró que su hijo le contó que la maestra decía malas palabras en el salón de clases y que por las tardes llegaba con olor a alcohol.

Pratts señaló que como su hijo le pidió que no fuera a hablar con nadie en la escuela, porque tenía temor de que la maestra tomara represalias contra él, fue y habló con el director escolar, quien le confirmó que estaba investigando varias querellas en contra de Alves Troche.

El día 7 de octubre, luego de una reunión con personal del DE y de la escuela, Pratts tomó acción y presentó una querella formal contra Alves Troche ante el DE por maltrato institucional.

Pratts señaló que fue luego de que los padres fueran citados por la división legal del DE, el día 11 de octubre, que decidieron ir al Tribunal de Cabo Rojo a solicitar una orden de protección, según le sugirieron.

“Socorro dijo que la única manera que podían sacar a la maestra de la escuela, era yendo al Tribunal para solicitar una orden de protección”.

El Tribunal los citó para una fecha posterior, en la que la maestra se allanó a la denuncia en lo que se investigaba el caso a nivel administrativo.

La vista preliminar en alzada continua el día 9 de diciembre.