Una cruda descripción de las agresiones que una niña de nueve años recibió por parte de su padrastro, fueron reveladas ayer por la agente María de Lourdes Pagán de la División de Delitos Sexuales en la sala del juez Jorge Toledo Reyna, del Tribunal de Carolina, donde se atiende por separado el juicio contra César Correa Suárez. El hombre enfrenta cargos de proxenetismo, rufianismo, comercio de personas agravado (porque aparentemente ofrecía sexualmente a la niña a amigos y parientes), actos lascivos, maltrato de menores y agresión sexual.

“Le dijo que se acostara en el piso del cuarto (de una casa abandonada). Allí le bajó el pantalón y el pantie…”, relató la agente Pagán sobre uno de varios incidentes relatados por la menor, que ahora tiene 15 años.

Dicho incidente fue solo un capítulo de la funesta historia protagonizada por esta niña y que culminó en un juicio en el que están acusadas nueve personas, incluido el padrastro a quien se le imputa haber iniciado el desgarrador abuso.

El proceso judicial del resto de los acusados -ocho en total, incluida la madre de la nena, Yomaris Ruiz Díaz- se ve en otra sala del tribunal luego de que Correa Suárez se ausentara al señalamiento inicial del caso que comenzó el pasado mes de septiembre. Así las cosas, el hombre fue arrestado por desacato y su caso tuvo que atenderse por separado. También hay otros dos implicados, pero por ser menores de edad sus casos se ven a puerta cerrada en el Tribunal de Menores.

A preguntas de la fiscal Maritza Valero, la agente Pagán dijo que entrevistó a la niña luego que el Departamento de la Familia removiera a la menor de su hogar en el 2014, tras descubrir que ésta estaba embarazada de uno de sus agresores. Para ese entonces, la pequeña cursaba el sexto grado y fue la trabajadora social del plantel donde estudiaba en Trujillo Alto, quien alertó a las autoridades tras recibir unas llamadas anónimas en las que se informaba sobre el presunto patrón de violencia sexual.

Pagán dijo que la niña relató que fueron múltiples las ocasiones en que su padrastro la manoseó en eventos que ocurrieron en diversos municipios y que incluían una casa abandonada.

Según la agente,  la menor relató que en otra ocasión, Correa Suárez “le sobó el cuerpo” y le tocó sus partes íntimas.

La agente agregó que la niña -quien testificó en el juicio durante circuito cerrado- nunca reveló nada porque, alegadamente, su padrastro la tenía amenazada. Actualmente, la menor tiene 15 años y vive en un hogar sustituto con el bebé que tuvo.

El testimonio de la investigadora fue el último presentado en el desfile de prueba del juicio que pudiera llegar a veredicto el próximo miércoles 18 de enero, luego que las partes presenten sus informes finales.

El resto de los acusados, cuyo caso continúa el 20 de marzo, son los siguientes: Noel Rodríguez Correa, Javier Omar Ruiz Ramírez, Janny R. Viera Pla, Edwin M. Boria Ramos, Agner Ruiz Martínez, Erick Joel Rodríguez Morales y Ramón L. Correa Suárez.