Aguadilla - Un jurado encontró culpable hoy a Javier Álvarez Luciano por los tres cargos que pesaban en su contra en el caso de maltrato contra su hijastro de 6 años en Rincón.

Tras unas dos horas de deliberación, el jurado llegó a una determinación unánime en los cargos de tentativa de asesinato, maltrato de menores y ley de armas. Aunque se sentaron 14 personas del jurado a escuchar la prueba, fueron 12 los que deliberaron.

Al escuchar la determinación, Álvarez Luciano apretó su mandíbula y permaneció inmóvil. Mientras, los jurados lucían satisfechos con su determinación. 

Acto seguido, el juez Manuel Acevedo Hernández impartió instrucciones al jurado para que evalúe los agravantes en el caso. El ministerio público, compuesto por los fiscales Silda Rubio y Néstor Márquez, solicitó que se impusieran cuatro agravantes en el cargo de tentativa de asesinato, cuatro en el de maltrato y cinco agravantes en el de la violación a la Ley de Armas. Al solicitar los agravantes, los fiscales destacaron la vulnerabilidad del menor, violencia con crueldad, desprecio, grave daño corporal y abuso de superioridad.

Relacionadas

Por los hechos, que se remontan al 26 de agosto pasado cuando el niño fue encontrado moribundo dentro del cilindro de una lavadora en la playa La Mojonera, en Rincón, enfrentará juicio a partir de este lunes la madre del menor Yaneli Lecona López.

"Se hizo justicia al niño y a otros niños de Puerto Rico que han sido maltratados", expresó la directora de la Administración de Familias y Niños (Adfan) del Departamento de Familia -que tiene la custodia del menor- Vanessa Pintado. 

Por su parte, el abogado de defensa, Hilton García Aguirre, dijo que no esperaba ese veredicto.

Uno de los momentos más dramáticos del juicio, que duró unas dos semanas, ocurrió el jueves pasado cuando el pequeño fue sentado a declarar mediante circuito cerrado. 

El niño logró responder a preguntas de la fiscal que Javier fue quien le golpeó con un bate en la playa, un día que fueron a pescar “sin que nadie lo sepa”.

También asintió que fue Javier quien le hizo “lo que pasó en la mano”, con agua caliente de la cocina. Dijo además que no quiere vivir con Javier “porque es malo”.