El abogado Harry Padilla, representante legal del corredor de seguros Pablo Casellas, dijo hoy que hubo un error en la prueba realizada a su cliente en la que arrojó positivo al uso de sustancias controladas.

El Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) informó ayer que "se realizó una serie de pruebas rutinarias con confinados seleccionados de forma al azar en la institución Bayamón 501. Entre ellos, se encontraba el confinado Pablo Casellas Toro, quien arrojó positivo a sustancias controladas”. 

Según dijo hoy Padilla, el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) realizó el pasado 20 de diciembre una prueba de dopaje a su cliente pero el personal de la agencia no solicitó información de los medicamentos recetados que consume Casellas, hijo del juez federal Salvador Casellas.

"Me he dado a la tarea de cotejar el documento de toma y muestra, y del informe disciplinario. Del primero surge que el personal del ICF no indagó al tomar la muestra si mi representado estaba o no tomando medicamentos recetados y provistos por el propio DCR que pudieran dar margen a arrojar lo que comúnmente se conoce como un 'falso positivo'", indicó Padilla en un comunicado de prensa.

"Si el personal del ICF hubiese solicitado al DCR o a mi representado el listado de medicamentos al examinar la muestra tenía que considerar el efecto de los mismos. No lo hizo. Ante estos hechos, estimo que el resultado que se ha informado es uno erróneo", sostuvo el letrado en sus declaraciones escritas.

El abogado dijo que su cliente actuó correctamente al impugnar el resultado y expresó estar convencido de que cuando se corrobore la prueba se determinará que lo que se ha notificado es "erróneo".

Padilla también dijo que se violaron los derechos de su cliente con la divulgación del informe porque es "ilegal que el DCR informe y confirme el resultado sobre pruebas de dopaje". El abogado resalta que su cliente es el único cuyo resultado fue notificado. 

"Ello demuestra el clima de persecución y hostigamientos a que siempre ha estado sometido mi representado", sostuvo Casellas.

Casellas fue condenado a cadena perpetua por el asesinato de su esposa, Carmen Paredes Cintrón, ocurrido el 14 de julio de 2012 en su hogar de Guaynabo.