El cuerpo de Steven Jomar Delgado, de ocho años, flotaba a unos diez pies de la orilla de la playa Monte Grande en Piñones, Loíza; su hermano, de cuatro años, lo observaba desde la arena. 

Esta fue la trágica escena que encontró, ayer, a eso del mediodía, Reina Rivera y su esposo al llegar al lugar que frecuentan por su padecimiento de asma. Fue el esposo de Rivera, quien entró al agua para socorrer al menor, pero era demasiado tarde.

“Cuando estábamos llegando, sin terminar de estacionarnos, vimos al hermanito parado frente a la playa mirando para el agua donde estaba el nene flotando”, narró Rivera.

“Nosotros tratamos de hacer todo lo posible, pero ya estaba sin signos vitales. No había manera de ayudarlos porque parece que llevaba mucho tiempo en el agua”, agregó la residente de Bayamón con frustración. 

Según el sargento Modesto Guevares, del Cuerpo de Investigación Criminal de Carolina, los menores se encontraban solos en el área y los familiares tardaron unos 30 minutos en llegar al lugar. 

“El nene estaba caminando solito, como siguiendo a su hermanito”, manifestó Rivera, quien indicó que el menor de cuatro años dijo en reiteradas ocasiones: “Papá y mamá están lejos”.

Sin embargo, el padrastro del niño, Pedro Luis Carrasquillo definió el suceso como una tragedia de segundos. 

“Estaba compartiendo con los nenes, mientras la madre estaba en el carro. El nene chiquito me pidió agua y se la llevé. Regreso al palito donde los estaba velando y en tres segundos pasó la tragedia”, contó el hombre de 37 años y residente de Caguas. 

De acuerdo a la investigación preliminar, la familia se encontraba en la playa Vacía Talega cuando los menores, se presume, se alejaron del lugar.

“Traté, me consuela que traté. Pero es lamentable tú querer ayudarlo, pero no poder. Te sientes impotente”, lamentó Rivera.

Al lugar también llegó el equipo de emergencias médicas quienes certificaron que el menor no tenía signos vitales. 

La madre del fallecido, Jomairis Delgado, de 22 años, fue ingresada al Hospital de la Universidad de Puerto Rico en Carolina, aunque no se precisaron las razones. 

La Policía indicó que no descarta la posibilidad de radicar cargos contra los padres. Personal del Departamento de la Familia llegó hasta el lugar. 

Un niño alegre e hiperactivo

Travieso, así recuerda el padrastro al menor. “Buscaba cualquier tontería para que jugaran con él. Era un niño travieso desde que nació. Estaba con medicamentos para que bajara las revoluciones”, expresó Carrasquillo en llanto. 

Mientras, Miriam Rivera, tía de Steven Jomar, dijo recordarlo por su alegría. “Él era bien contento, un amor. En la escuela estaba lo más bien. Era un niño al fin, siempre contento, brincando, jugando, solo que era hiperactivo”, recordó entre lágrimas. 

El fiscal Luis Rivera Méndez comunicó que el cuerpo sería enviado para que le realicen los análisis forenses.