Las autoridades descartan que el motivo del crimen de una mujer que fue baleada ayer, miércoles, en el Viejo San Juan, esté vinculado con la violencia de género.

Los sucesos se reportaron a las 5:55 p.m. de ayer frente a un colmado ubicado en la calle San Agustín en San Juan, cuando un hombre le disparó en varias ocasiones a Margarita Pérez Rosario, de 30 años, quien era residente del Hogar Casa Rosa. 

La víctima falleció a las 10:10 p.m. de ayer mientras era intervenida quirúrgicamente en el Centro Médico de Río Piedras.

De acuerdo a la investigación preliminar, el policía municipal de San Juan adscrito a la alcaldía, identificado como Raúl Cruz Rosario, fue quien intervino con el sospechoso ya que cuando le cursaron la querella de detonaciones en el área vio huyendo por la calle Matías Ledesma al individuo con la pistola en la mano derecha intentando ocultarla en un bolso negro.

El sospechoso, de 38 años de edad, logró abordar un automóvil marca Toyota Yaris, color blanco, que era conducido por una mujer, pero el policía municipal impidió que escapara poniéndolo bajo arresto.

Al detenido se le ocupó una pistola marca Glock de calibre .40 con una mira laser y dos cargadores adicionales, uno de ellos estaba vacío y $237 en efectivo.

Inicialmente la mujer le dijo a la policía que no conocía al individuo y que se le había montado a la fuerza en su auto, sin embargo, durante el interrogatorio reveló que era la hijastra del arrestado.

El director del Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) de San Juan, comandante Luis F. Pabón Bosque, por su parte, dijo que el motivo del crimen se relaciona con riñas anteriores entre la víctima y su agresor.

“El motivo del asesinato es por una discusión, riñas viejas, roces por problemas personales, no es un caso de violencia de género”, argumentó el comandante.

Los investigadores también indagan sobre la procedencia del arma ocupada.

El arrestado tiene expediente criminal por violencia de género en el 2007 y por el delito de agresión atenuada en el 2012, según las fichas que están registradas en el sistema de información de la División de Servicios Técnicos.

El caso fue investigado por el agente Alex R. Díaz junto al fiscal Jorge A. Morales Benítez.