Aguadilla - El niño encontrado golpeado y moribundo dentro del cilindro de una lavadora en la Playa La Mojonera, en Rincón, inició hoy su testimonio mediante circuito cerrado en el juicio contra su padrastro, Javier Álvarez Luciano,  acusado de tentativa de asesinato y maltrato de menores.

La fiscal Silda Rubio pidió al juez Manuel Acevedo Hernández una orden de mordaza a todos en sala, que el magistrado garantizó extendiéndola al uso de celulares.

Sentado ante la cámara del lado de una trabajadora social, en un inicio se vio al pequeño jugando con juego de video portátil.  Una vez la fiscal comenzó a hablarle, se contrajo, cubriéndose la cara con las rodillas y las manos en posición fetal.

En la sala donde se transmite en televisores el testimonio del menor, se vio a uno de los miembros del jurado –compuesto por siete hombres y siete mujeres- incómodo, tapándose la cabeza con las manos y mirando al suelo.  Una fémina se limpiaba los ojos de lágrimas. 

Aun en su intento de ser persuasiva con el menor por espacio de algunos 20 minutos, la fiscal Rubio no consiguió que el niño siquiera la mirara.

Pidió un receso, y el abogado de defensa, licenciado Hilton Garcia Aguirre,  solicitó que el menor, como ya estaba juramentado, no fuera separado de los alguaciles ni la trabajadora social.

Todos salieron de sala sin emitir comentarios. Se espera que en la tarde continúe el interrogatorio,  de estar preparado el menor a sentarse a hablar.

Por el incidente con el niño, encontrado abandonado el 26 de agosto de 2013, también enfrenta cargos su madre Yaneli Lecona López.