El Departamento de la Familia informó que inició una investigación centrada en la protección de dos menores de edad intervenidos por agentes de la Policía Municipal de Bayamón que se movilizaron anoche a un lugar donde detectaron a un grupo de personas causando daños a un letrero de un complejo de viviendas.

La licenciada Laura Santa, directora interina del Departamento de la Familia en la región de Bayamón, dijo a este medio que una trabajadora social intervino, una vez la agencia fue notificada por la Policía sobre esta situación. El recurso de esa agencia, según aseguró, se movilizó a eso de las 5:30 a.m. y después de indagaciones de rigor determinó que los menores quedarían bajo la custodia de familiares directos, explicó la abogada.

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Horas antes, El comisionado de la Policía Municipal de Bayamón, Ángel Jiménez, dijo que el Departamento de la Familia "no atendió diligentemente" el caso que les reportaron en la noche del jueves sobre unos menores que supuestamente deambulaban por las calles.

Jiménez hacía referencia a los dos menores que formaban parte de un grupo de ocho personas que fueron captados a eso de las 8:00 p.m. por las cámaras de seguridad de las autoridades mientras causaban daños a la propiedad en el complejo de vivienda de Parque 228 en Bayamón.

"Como parte del protocolo, nuestro personal activa la Línea de Maltrato de Menores. Se comunican con la señora Vilma Escalera. Les dan el número de caso, pero les refiere que ellos no pueden hacer nada, que ellos no podían trabajar con la situación", sostuvo Jiménez.

"Nosotros seguimos trabajando y, posteriormente, a las 7:00 de la mañana se presenta un trabajador social, que es directamente del Departamento de la Familia a atender la situación", agregó el comisionado.

Sobre esos dos adolescentes, Santa dijo que un menor de 15 años quedó bajo la custodia de su madre y el otro, de 13 años, bajo la custodia de su abuela. Sostuvo que la Policía, amparada en el criterio de corresponsabilidad del Estado en casos de menores, intervino y avisó al Departamento de la Familia, que realiza al presente procesos confidenciales centrados en el bienestar y la seguridad de esos adolescentes.

Como parte del protocolo en estos casos, Santa reconoció que los menores serían sometidos a un examen médico, así como a una evaluación sicológica y que la trabajadora social completaría una investigación para presentar recomendaciones sobre ambos menores.

Esta mañana trascendió que la intervención del Departamento de la Familia surgió unas 10 horas después de la intervención con el grupo sospechoso de dañar los letreros y el que habían otros menores. Por eso los adolescentes pernoctaron en el cuartel municipal.

De la investigación policiaca se desprende que a través de las cámaras de seguridad que opera el municipio se observó a un grupo de cinco varones y tres mujeres arrancando unas letras de un rótulo en el citado complejo residencial.

Al llegar la Policía Municipal, los cinco varones huyeron de las agentes. Sin embargo, las tres jovencitas, dos menores de edad y una de 18 años, fueron detenidas a eso de las 8:00 p.m. del jueves.

Se alega que tres de los cinco varones tuvieron “cargo de conciencia”, por lo que llegaron hasta el cuartel para acompañar a las féminas. Se trataba de dos menores de 15 años y uno de 13.

Agentes de la Policía Municipal que se encontraban en el cuartel afirmaron a este medio que desde que ocurrió la detención realizaron una querella al Departamento de la Familia, sin tener respuesta inmediata.

En la espera, se alegó que el padrastro de una de las jovencitas indicó que pagaría por los daños cometidos. Por ello, se permitió que todas se marcharan anoche mismo con sus familiares.

La historia de los varones fue distinta, pues tuvieron que pernoctar en el cuartel.

Se informó que uno de ellos, de 15 años, fue buscado por sus progenitores durante horas de la madrugada.

No obstante, los otros dos, de 15 y 13 años, amanecieron en el cuartel. Ambos dijeron que llevaban varios días "en la calle", según policías que atendieron el caso.

Los oficiales pudieron contactar a uno de los parientes, la abuela del menor de 13 años. Esta llegó hasta el cuartel poco después de las 5:00 a.m. y negó en entrevista con este diario que su nieto estuviera "deambulando”.