Personal de la Guardia Costanera de los Estados Unidos intervino con dos puertorriqueños a quienes les incautó su pesca, debido a que fue capturada en el banco Abrir La Sierra, una zona marítima donde al presente esa actividad está prohibida.

La pesca en Abrir la Sierra, localizado a 14 millas náticas al sureste de Mayagüez, está vedada desde el 1 de diciembre hasta el 28 de febrero, indicó la Guardia Costanera en un comunicado de prensa.

La tripulación de la embarcación Raymond Evans también confiscó cinco trampas de pesca ubicadas en el banco Tourmaline, a unas ocho millas naúticas de Mayagüez, otra área donde la pesca está prohibida actualmente. El uso de trampas para peces es considerado ilegal por el daño que estas pueden causar a los arrecifes protegidos, así como a la vida marina en general.

La pesca incautada en Abrir de la Sierra sumó 10 pargos rojos y dos meros del mismo color.

“Los hombres estaban pescando peces protegidos en un área que fue cerrada por la temporada. Las actividades de pesca ilegal representan una amenaza para las especies de peces y otras especies protegidas de vida marina que necesitan tiempo suficiente para recuperar sus poblaciones durante la temporada baja”, señaló Andrew Connell, oficial de la Guardia Costera en San Juan.

Según se informó, cerca de las 7:30 a.m. del jueves pasado, la tripulación del helicóptero MH-65 Dolphin, de la Estación Borinquen en Aguadilla, observó a los dos hombres un bote de pesca de 21 pies, en el área protegida de Tourmaline, por lo cual se desvió al escampavía Raymond Evans para que los interceptara.

Personal de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) y del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), también llegaron a la escena y emitieron una multa por violación a los reglamentos de pesca a los pescadores.