Waldemar Quintana Torres fue ingresado a prisión esta noche, poco después que la jueza María Luz Rodríguez Cruz encontró causa para arresto en su contra por el secuestro del infante Jesús Joel Ortega.

La jueza del Centro Judicial de Bayamón encontró causa en todos los delitos que se le imputaron al hombre de 36 años y le señaló una fianza de $5 millones.

Quintana Torres, detenido temprano en Guaynabo, donde se recuperó al niño de un año que se asegura secuestró el jueves en Vega Alta, no pudo prestar la fianza y fue ingresado en el Complejo Correccional de Bayamón.

El fiscal Martín Ramos, de la División de Crimen Organizado del Departamento de Justicia, informó que al sospechoso se le presentaron cargos por los delitos de secuestro agravado, maltrato de menores, apropiación ilegal de un vehículo de motor y empleo de la violencia contra un agente de orden público.

Relacionadas

Las denuncias por violación al artículo 245 del Código Penal, por el empleo de la violencia contra un agente del orden público, surgieron porque durante su arresto Quintana Torres mordió en un antebrazo y una mano a la sargento Nilsa E. Morales Espinel, adscrita al Precinto de Juan Domingo.

La jueza Rodríguez Cruz señaló la vista preliminar del caso para el próximo 14 de abril.

Llanto incesante 

El llanto continuo del infante de 12 meses de vida era lo único que se necesitaba escuchar para conocer el terror al que estuvo expuesto tras ser secuestrado el jueves por el hombre identificado como Waldemar Quintana Torres.

Ni el globo azul que improvisaron con un guante los paramédicos, ni los mimos de las oficiales que intervinieron en la operación para rescatarlo en una residencia de Guaynabo, eran suficientes para contener los incesantes gemidos del confundido bebé con todo el alboroto a su alrededor mientras era trasladado en ambulancia desde un cuartel de la Policía en Guaynabo hasta un hospital.

Desde que Jesús Joel fue reportado secuestrado en la tarde del jueves, las autoridades lo buscaban afanosamente hasta que lo encontraron en una casa de Guaynabo este viernes en la mañana junto a Quintana Torres, quien dijo tener una relación sentimental con la madre del menor desde hace tres semanas tras, supuestamente, conocerse en un centro de rehabilitación. La mujer fue identificada esta noche por la Policía como Deborah Luz Ortega González.

 Las razones para que Quintana Torres se llevara al niño no han sido divulgadas por las autoridades que trabajan en la investigación. El teniente Joseph Molina, director de la División de Robo a Bancos y quien tuvo a su cargo la búsqueda, sí dijo que el hombre fue convicto por varios delitos graves en el pasado y recientemente salió de prisión.

En relación a los hechos, según la versión que maneja la Policía, Ortega González, la madre del menor, había llegado con el imputado y el niño el jueves a una farmacia en Vega Alta. Cuando sale al estacionamiento, el hombre se había marchado en su vehículo con el menor en el interior sin avisarle. A eso de las 6:40 de la tarde, ella le notificó de lo ocurrido a las autoridades a través de un guardia de seguridad de la farmarcia.

La alerta Amber se activó a la 1:00 de la madrugada de este viernes. Molina explicó que tomó todas esas horas la activación debido a que no pueden hacerlo hasta que tengan en su poder y puedan corroborar toda la información como la identidad del menor secuestrado, datos del vehículo, entre otras cosas. Trascendió que el vehículo, una guagua Mazda CX9 del año 2008, había sido comprada ese mismo día por un familiar de la madre del niño.

Tras la activación de la alerta Amber, se notificó a oficiales de diferentes agencias, además de la Policía, incluyendo oficiales del Negociado Federal de Investigaciones, el Departamento de Justicia y la Interpol, así como a los cuerpos policiales municipales.

El drama llegó a su fin luego de que se hiciera pública la información del menor y de Quintana Torres, lo que provocó que llegaran varias confidencias a las autoridades. Una de ellas indicaba que se encontraba en un área conocida como el callejón Los Robles en Guaynabo.

"Sabemos muchas direcciones que tenía él en diferentes lugares. Esa era una de esas direcciones", dijo el teniente José Luis Ortiz, jefe del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) del área de Bayamón.

De inmediato, oficiales estatales y del Municipio de Guaynabo llegaron a la residencia, donde hallaron al menor y a Quintana Torres.

"Inclusive, yo recibí una llamada también de una persona que es del área y me brindó la info, la cual se canalizó y se arrestó al individuo", dijo Víctor Nieves, teniente de la Policía Municipal de Guaynabo.

"Entiendo que quizás, buscando algo de seguridad, fue a un área familiar donde era conocido y, pues, fue el error que cometió. Lo identificaron rápidamente y dieron la voz de alerta", agregó. "Lo que se dijo fue que andaba con el menor".

De acuerdo con Ortiz, jefe del CIC, Quintana Torres trató de escapar. "No se entregó voluntariamente. Tuvieron que hacer una búsqueda después de que lo localizan y lo ponen bajo arresto", abundó Ortiz.

No se especificó si dentro de la casa había más personas. Sólo se dijo que la propiedad supuestamente pertenece a un familiar del detenido. Allí encontraron al menor.

"(El infante) se veía en buen estado. Estaba desprovisto de vestimenta… sólo con un pamper", relató Nieves.

Ambos fueron llevados al cuartel de la Policía estatal en Juan Domingo. Desde allí el menor fue trasladado a un hospital, como establece el protocolo en estas situaciones, para verificar su estado de salud.

Antes de que Quintana Torres fuese llevado al Cuartel General de la Policía para la posterior radicación de cargos, oficiales de varios rangos y del FBI se reunieron en el cuartel de Juan Domingo. Según Moisés Quiñones, portavoz del FBI, la agencia federal no asumirá jurisdicción en la pesquisa.

Entretanto, a su salida del cuartel, Quintana Torres dijo ser inocente de lo que se le imputa.

"Yo no hice nada de eso, porque ella es mi pareja", dijo Quintana Torres. "Nadie secuestró a nadie".

 "Yo no secuestré a nadie. Yo simplemente estaba buscando mi ropa con el nene y se explotó una goma, nada más", sostuvo Quintana Torres mientras era escoltado por oficiales de la Policía hasta la patrulla.

Pese a la cantidad de horas que pasaron desde que se marchó con el bebé sin avisarle a la mujer, Quintana Torres dijo que no le avisó de su partida "porque era una expareja la que tenía la ropa".

"Yo simplemente lo que hice fue que me lo traje a buscar mi ropa, nada más… Ella sabe que otra veces ando con ese nene", dijo.

Temprano en la mañana, una mujer que dijo ser hermana de Quintana Torres expresó a medios de prensa en el cuartel de Juan Domingo que su hermano había cumplido una condena en prisión desde que tenía 18 años.

Por su parte, Molina dijo que Quintana Torres había salido de la cárcel hace unos meses.

"Cumplió por varios delitos graves, como robo, secuestro y apropiación ilegal", sostuvo Molina.

Sin embargo, dijo que todavía indagaban más información sobre aquellos cargos.

Por otro lado, Molina destacó y agradeció la cooperación de la ciudadanía por la información que los llevó a encontrar al niño.

Los agentes de la División de Robo a Bancos y del CIC consultarían con la fiscalía para la posible radicación de cargos. Lo que estará por verse es si las autoridades federales asumirá la jurisdicción del caso.

En la mirilla del Departamento de Familia

Tras rescatar sano y salvo a Jesús Joel, ahora los investigadores indagarán si la tragedia de este niño se limita a las pasadas horas o si se extiende más allá en su corta vida, pues el Departamento de la Familia confirmó que tiene querellas pendientes para atender con relación al menor.

La portavoz de prensa de la Administración de Familias y Niños (Adfan), Lynnette Moreno, comunicó que la agencia recibió dos querellas por negligencia contra la mujer en el 2012 y una tercera, por el mismo motivo, en 2013.

"Hay una investigación que está en curso de un referido del 2013. Es un referido por negligencia. Pero había dos referidos del 2012", dijo Moreno.

Sobre la investigación en curso, se dijo que faltaban unos detalles para hacer un plan de trabajo con la mujer.

"Se había entrevistado a la mamá y varios familiares. Faltaban unas situaciones de trabajar con la mamá para terminar el referido", agregó la portavoz de prensa.

En cuanto a las querellas del 2012, Moreno indicó que no se logró darle curso.

"Aparentemente, según la información que obtuve, es que se fueron a investigar, pero que la familia no estaba. Que los visitaron y todo, pero no los lograron contactar", explicó Moreno.

Sobre la situación de hoy, Moreno dijo que trabajadores sociales de la agencia se encuentran colaborando con las autoridades y que asumirían la custodia del niño, pues ya existe una investigación activa en el DF.

La reportera Ivelisse Rivera colaboró en la redacción de esta historia

El sujeto alegó que solo fue a buscar ropa con el niño y se le explotó una goma.