Ponce. Aunque la Policía informó que Félix Ramos Domínguez confesó el asesinato de su expareja Arelis Suárez Santiago, perpetrado el 23 de enero en Juana Díaz, la fiscal del caso no confirmó ayer que tuviera tal admisión.

“Tenemos unas manifestaciones”, dijo la fiscal Natalia Zambrana Quintana al salir de la sala 403 del Tribunal de Ponce, luego de que se pospusiera para el 7 de febrero la vista preliminar contra Ramos Domínguez, quien está acusado de asesinato y otros delitos.

La vista se aplazó, precisamente, porque el abogado Javier Ciordia González, de la Sociedad para la Asistencia Legal, presentó una moción para obtener “documentos de admisiones o confesiones en poder de la Fiscalía”.

Aunque el abogado hizo la petición el 27 de enero, no se incluyó copia en el expediente, por lo que la fiscal ni el juez Aníbal Lugo Irizarry conocían de la misma. Zambrana Quintana pidió dos días para responder por escrito y afirmó que “antes del viernes entregaremos los documentos”.

Según la Policía, Ramos Domínguez irrumpió en la residencia de la abuela materna de Suárez Santiago, la madrugada del 23 de enero, rompió la puerta y la mató a cuchilladas. Ese día por la mañana se entregó en la comandancia de Bayamón y, según el director del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC), comandante Wilson Lebrón, el hombre de 33 años confesó el crimen.

“Cuando el individuo comienza a dar información se le leen las advertencias y se pone bajo arresto. Luego notificamos al CIC de Ponce. Para efectos de la investigación, la información que ofreció es una confesión sobre los hechos”, dijo Lebrón en ese momento.

Al plantearle eso a la fiscal Zambrana Quintana, esta respondió: “Correcto. Eso fue lo que se manifestó para la prensa. No obstante, una vez una comienza la investigación, va encontrando con lo que verdaderamente contamos para probar el caso”.

La representante del Ministerio Público tampoco precisó cuántos testigos sentará a declarar en la vista preliminar. Al menos ayer se presentaron al tribunal el agente investigador Francisco Meléndez Alvarez, de la División de Homicidios de Ponce, y la abuela materna de Suárez Santiago.

La Policía dijo que el crimen de la mujer de 31 años ocurrió en presencia de la abuela y los hijos de la víctima, de cuatro y nueve años de edad. La abuela está siendo atendida por la Oficina de Compensación y Servicios a las Víctimas y Testigos de Delitos, mientras los menores están bajo la custodia de familiares.

José Suárez, padre de Arelis, dijo ayer que los niños están recibiendo ayuda psicológica y que todavía no se han reincorporado a la escuela.

Ramos Domínguez, quien ayer acudió a sala vestido con el uniforme caqui de sumariado y esposado de manos y pies, enfrenta cargos de asesinato en primer grado, maltrato a menores, maltrato a persona de edad avanzada, escalamiento agravado, vehículo hurtado y violación a la Ley 54. Al momento se encuentra preso en la cárcel Las Cucharas en Ponce, tras no pagar una fianza de $3 millones.