El director ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) en Puerto Rico, William Ramírez, opinó hoy que el gobernador Alejandro García Padilla podría detener, si tiene razón para ello, la extradición a California, Estados Unidos, de la puertorriqueña Maha Abdel Rahim, quien fue encarcelada por incumplir con la devolución de su hijo de cinco años a su padre residente en el estado del oeste de EEUU.

Ramírez recordó que junto al Colegio de Abogados compareció a un tribunal en representación del gobernador de North Island, para detener una petición de extradición de un recluso condenado a la pena capital en ese estado, donde no existe la pena de muerte.

Explicó que luego de que el confinado llegó a un acuerdo con las autoridades para que se declarara culpable a cambio de ser sentenciado a la pena capital, el gobierno federal lo reclamó en extradición porque querían procesarlo bajo la pena capital y el gobernador de Rhode Island se rehusó a entregarlo.

Ramírez opinó en una entrevista radial (Radio Isla 1320) que el Departamento de la Familia debió haber investigado la situación de Abdel Rahim porque tenía conocimiento de lo ocurrido y no lo atendió.

Sostuvo que aunque no le pueden arrebatar la jurisdicción al Tribunal de California, un informe del Departamento de la Familia "ciertamente la hubiese ayudado, porque a esa mujer no se le quitó el niño por ser mala madre u otras cosas que se contemplan usualmente en estos casos, pierde la custodia porque vive en Puerto Rico, es por la situación de Puerto Rico, así que es una situación prejuiciada".

El director ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles indicó que ya los abogados en California conocen de esa situación y atenderán ese asunto.

Ayer, domingo, más de un centenar de personas se congregaron frente a la cárcel para Mujeres de Vega Alta para expresar su apoyo a Abdel Rahim, recluida desde el pasado jueves tras no haber devuelto a su hijo al padre del niño, Rasim Hallum, residente que California.

La madre de Maha, Muntaha Abdel, y su hermana Muna Abdel Rahim, llegaron a la cárcel, adonde les permitieron entrar para ver a su pariente, aunque previamente rehusaron hacerlo porque no era día de visitas.

“Saludos a mi gente. No tengo palabras, solo agradecimiento. Un abrazo a todos. Gracias por luchar contra la injusticia, el fraude y el soborno”, dijo Abdel Rahin en una carta que envió con su hermana a quienes se congregaron frente a la cárcel y en la que agradeció la solidaridad que le han expresado.

Además, en la misiva, leída por su hermana Muna, Maha califica de falsa la imputación y señala que “lamento que el Departamento de la Familia, por segunda ocasión, no protegió a un niño de cinco años del maltrato, pornografía y drogas. Confío en Dios, con la ayuda de mi país, que toda la verdad saldrá a la luz”.