Gurabo.-  Don Efraín Martínez Calderín, de 69 años, siempre lo dijo; el día que falleciera alguno de sus hijos o nietos, sabía que no podría aguantar el dolor. ¡Y así fue! Como si se tratara de un presagio, el hombre murió de un infarto momentos después de saber que uno de sus hijos había sido asesinado. 

Esa es la dramática realidad que enfrenta una familia de Gurabo, que ayer velaba los cuerpos de dos de los suyos, Efraín Alexis Martínez Figueroa, el gruero de 29 años que fue ultimado el domingo en Cidra en circunstancias que aún no han sido esclarecidas, y su padre, don Efraín, quien murió luego de recibir la noticia del asesinato de su vástago.

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Varios de los siete hermanos que componen la familia recordaron los momentos de desesperación que vivieron al recibir la tan inesperada noticia.

“Yo iba de camino a casa de mi hermana en Humacao en son de paseo. Cuando voy llegando, me entra la llamada de papi que me dice: ‘Ito, Ito, vente para acá porque Efraincito tuvo un accidente y yo me estoy sintiendo mal’; entonces me llama mi otro hermano y me dice que a Efraincito lo habían matado”, relató Efraín Martínez Rivera, de 46 años y uno de los hijos mayores del fenecido.

“A todo esto yo no lo creía. Quise creer que era mentira porque me quedé bruto, confundido, pero con mucha calma, irónicamente. Me encomendé a Dios porque uno puede cometer una torpeza, pero cuando llegamos al hospital, a papi le había dado un infarto y había muerto”, añadió visiblemente afectado por la doble pérdida.

 Asimismo, Mixia Martínez Rivera, una de las hijas mayores de don Efraín, también conocido en Gurabo como Maraca por ser un reconocido criador de plantas de jengibre o maracas en ese pueblo, recordó con tristeza la cadena de eventos que terminó con la trágica partida de padre e hijo.

“Cuando yo me entero le comento a mis hermanos que si eso era cierto, lo de la muerte de Efraincito, eso iba a matar a papá, porque conocemos cuánto amor nuestro papá siente por nosotros, no es que Efraincito era su favorito. Hubiera pasado si cualquiera de nosotros hubiera muerto. Y estamos convencidos cada uno de esto”, aseguró Mixia  mientras intentaba suprimir las lágrimas.

“Cuando llegamos al hospital no nos dejaban pasar, estaba mi papá con su esposa, Judith, y una amiga de la familia que estaba ayudándolos a bregar con la situación. Cuando esa amiga sale lo que dijo fue ‘no puedo con esto’ y ahí supe que algo no estaba bien. La doctora entonces nos informa de que papi había muerto por un infarto”, relató.

 Por su parte, Ixia Martínez Rivera, gemela de Mixia, dijo sentirse destrozada ante semejante pérdida pero que, tal y como don Efraín siempre les inculcó, están enfocados en superar la pérdida y seguir adelante. 

“Yo estoy devastada, yo temo por mi hermana porque, aunque es la más fuerte, se puede desplomar y así estamos todos. Lo que hacemos es recordarlo y recordar los buenos momentos y como todos hemos sido buenos hijos eso nos da tranquilidad.  Papi nos enseñó muchas cosas. A amar la vida y ser siempre luchadores. Él era un hombre alegre, vacilador, con muy buen sentido del humor y era un alcahuete con todos sus hijos y sus nietos”, recordó Ixia, de 48 años.

“No queremos amargura, como nos enseñó papi. El perdón da paso a la libertad del dolor y la amargura. Nosotros sufrimos porque pensamos que ellos sufrieron pero yo sé que en ese momentito que pasó lo que pasó, en ese instante, Dios se los llevó rápido y ellos no sufrieron. Esto es grueso, está bien duro, pero en el proceso tenemos que recordarlo y estar juntos y aquel que no ha podido sonreír tenemos que ayudarlo a hacerlo porque la vida sigue”, añadió.

Los restos de padre e hijo serán sepultados hoy viernes a las 11:00 de la mañana en el Cementerio Municipal de Gurabo.

Sin pistas

Los detalles sobre el asesinato de Efraín Alexis aún no han sido esclarecidos por la Policía y la información que posee la familia es limitada. No obstante, Mixia especuló sobre las circunstancias en que su hermano perdió la vida.

“Yo pienso que fue una situación que se salió de control. Un mal humor de alguien que no se supo controlar por lo que nos han dicho los policías y por lo que circula en la prensa. Pienso que fue una situación que se descontroló”, aseguró la mujer.

“A él lo llamaron para dar un servicio de grúa para recoger un auto y fue en compañía de otro muchacho. Recogen el auto y de ahí lo llevan a un destino. Esa tercera persona que lo llamó para sus servicios -que todavía no sabemos quién es-  les dice que paren en un negocio. Mi hermano no conoce ese lugar y parece que testigos dijeron que algo pasó que los vieron correr hacia la grúa, pero en realidad no sabemos con certeza porque no nos han dado una versión oficial. Todo lo que tenemos son especulaciones”, añadió.

Los hechos en que perdieron la vida Efraín Alexis y Omar Ramírez Pérez, de 19 años y vecino de Aguas Buenas, el pasado domingo a eso de las 8:30 de la noche ocurrieron en el sector Candela del barrio Rincón en Cidra y todavía las autoridades no tienen un móvil concreto.

La Policía indicó que la investigación del crimen no está dirigida hacia un móvil asociado a sustancias controladas, ya que ninguna de las víctimas tenía récord delictivo.