Un instructor de tiro se declaró culpable hoy por la mañana ante el juez federal Francisco Besosa por participar de un esquema de falsificación de documentos e identificaciones para la tramitación de más de 1,000 licencias de portación de armas de fuego.

El individuo, identificado como Julio C. Medina Mojica, fue acusado junto al abogado Antonio Peluzzo Perotín, los dueños de una armería, Julio Colón Santiago y su esposa María del Carmen Rivera Negrón, y otro instructor de tiro, José M. Prado, mediante un pliego acusatorio enmendado que se radicó el 1 de mayo de 2014.

A Medina Mojica se le había fijado una fianza de $5,000 por su participación en la conspiración, la cual se limitó a firmar certificaciones de uso y manejo de armas de fuego para ciudadanos que no habían participado de los cursos requeridos para la obtención del documento, pero la garantía de comparecencia se revocó en septiembre de 2014 cuando el sujeto violentó las condiciones impuestas por el tribunal al visitar un polígono de tiro.

Ante las preguntas del juez, el confinado hizo la admisión de culpabilidad mediante un acuerdo que podría ser una sentencia mínima por el tiempo cumplido en prisión (término que vencería durante su vista de sentencia programada para el 18 de junio) o un máximo de 37 meses de prisión.