¿Tráfico humano para explotación sexual?

Se trata de apartamentos recónditos con poca iluminación. En algunos de sus cuartos hay colchones en el piso. Las condiciones de higiene no son las mejores, pero aun así, la clientela del establecimiento entra y sale del local con cuentagotas las 24 horas del día.

Las autoridades policiales investigan si la creciente cantidad de las trabajadoras dominicanas en las casas de masaje del país podría deberse a un esquema de tráfico humano. Mensualmente, agentes adscritos a la División de Drogas y Vicios de la capital detienen un promedio de 100 a 125 mujeres en los establecimientos por actos de prostitución. Aunque una porción significativa de las detenidas son puertorriqueñas, un número considerable de ellas son dominicanas. Inmigración deporta las trabajadoras ilegales a su país, pero la agencia intenta establecer una clara distinción entre lo que podría constituir el tráfico humano para la explotación sexual e inmigrantes ilegales que voluntariamente optan por la prostitución.

“El tráfico humano no es común en Puerto Rico”, sostuvo el portavoz de Aduana y Protección Fronteriza, Iván Ortiz. No obstante, el portavoz aclara que uno de los principales obstáculos que enfrentan las autoridades es poder identificar a las víctimas que fueron forzadas a incurrir en la prostitución en contra de su voluntad. “En algunos casos, la persona puede llegar a la prostitución como parte de un contrabando, cuyo fin es el transporte del inmigrante”, añadió.

Desde el cierre de varios prostíbulos durante la administración de Pedro Rosselló, las casas de masaje se convirtieron en una de las principales tapaderas de la actividad delictiva, aunque algunos clubes de bailarinas exóticas también le ofrecen a su clientela el servicio clandestino. Otros negocios gay también se han vinculado a la prostitución masculina.

Pero en las casas de masaje también se han detenido maestras, enfermeras, universitarias, entre otras mujeres puertorriqueñas que han acudido a los establecimientos por la recesión económica.

Ayer por la noche, agentes realizaron un operativo en un “salón de belleza” de la avenida Eleanor Roosevelt donde se detuvo a tres mujeres dominicanas. “Por sexo completo cobran $160”, dijo un agente encubierto que participó del operativo.

Paralelamente, se realizó otro operativo en otro salón de belleza en la calle Escorial de Puerto Nuevo donde se detuvieron dos puertorriqueñas y tres dominicanas. De ser encontradas culpables de proposiciones deshonestas y prostitución, volverían a la calle luego de pagar una multa que suele ascender a $500. “Es un mundo sórdido y genera mucho dinero”, dijo el teniente Félix Bauzó.